Monologuistas lamentan las barreras y los prejuicios para la mujer en el humor

Las monologuistas y actrices andaluzas Olga Salut y Virginia Muñoz han lamentado las barreras y los prejuicios hacia la mujer en el tema del humor al estimar que es “una pena” que el tema de los monólogos estén “tan cerradas las puertas” al sector femenino.

Las dos monologuistas han reflexionado en una entrevista con EFE sobre la dificultad que encuentran las mujeres para abrirse camino en este oficio, donde ellas ya acumulan más de una década actuando juntas. “Tenemos muchas puertas cerradas porque en muchos bares o salas no contratan con tanta facilidad a una mujer humorista que a un hombre”, nos dice Olga Salut (Málaga, 1974).

Las monologuistas, que anoche actuaron en “La Sala Café Club” por primera vez en la ciudad ceutí, han reconocido: “estábamos cansadas de que el tema del monólogo estuviera tan cerrado a las mujeres porque hay muchas monologuistas muy buenas pero no trabajan tanto como los hombres”, dice Olga.

Virginia Muñoz (Málaga, 1977) no entiende estos prejuicios. “Cuando llegamos a un bar se nota en la actitud corporal de la gente ya que sale un hombre a hacer un monólogo y el público está predispuestos a reirse pero cuando sale una mujer inconscientemente se retraen un poco en la silla y no te dan la confianza plena que tienen los hombres”.

Aunque las mujeres como público “somos muy exigentes y nada nos parece bien, lo cual es una realidad”, dice Olga, lo cierto es que entienden que “no sólo está Eva Hache haciendo humor pero cuando ves los carteles hay ocho hombres y sólo una mujer o ninguna, lo cual es una pena”, reconoce Virginia Muñoz.

Las dos monologuistas, que han participado en varias series de televisión en Andalucía -entre ellas “SOS Estudiantes”-, tienen algo claro: “cuando en un local tienen una mala experiencia con un chico llaman a otro pero si la tienen con una mujer no vuelven a llamar a más chicas o por lo menos durante un buen tiempo, eso es una realidad”, reflexiona Virginia.

Pese a todo, Olga Salut tiene claro que no van a tirar la toalla. “Seguimos en esa lucha intentando romper esa historia y en los sitios donde actuamos se consigue porque funcionamos bien; hay que reirse de todo, igual sea un hombre que una mujer, pero lo cierto es que se han reducido la programación de monólogos en los bares o salas pequeñas”.

La malagueña ha señalado que ahora “hay un vacío, el boom de los monólogos ha pasado y en estos momentos se ha producido un pequeño parón porque se programa más a lo seguro a pesar de que los monólogos funcionan muy bien en todos los sitios de España, no sólo en Andalucía”, nos apunta Virgina Muñoz.

Las dos actrices y monologuistas reflexionan sobre la necesidad de seguir en la brecha. “Hay que apoyar las iniciativas culturales de gente entrega y ser conscientes de que no cuesta tanto una noche de risa”, nos comenta Virginia mientras Olga añade: “la cultura puede ser una vía de escape y somos muy necesarios”.