El hijo de Trump participó en una reunión sobre el futuro de Siria, según el “WSJ”

Donald Trump Jr., el hijo mayor del presidente electo de EEUU, participó en octubre pasado en una reunión privada en París en la que se analizó la posibilidad de apoyar los esfuerzos de Rusia para detener la guerra en Siria, informó hoy el diario “The Wall Street Journal”.

La reunión se llevó a cabo el 11 de octubre en el hotel Ritz de la capital francesa y en ella participaron diplomáticos, políticos y hombres de negocios, según confirmaron algunos de los participantes en la cita.

Entre ellos se encontraba Randa Kassis, que integra uno de los grupos de la oposición siria que fue creado en Moscú y que, según el “WSJ”, está apoyado por el Kremlin en la búsqueda de un final para al guerra que estalló en Siria hace cinco años.

El acto estuvo organizado por el esposo de Kassis, Fabien Baussart, presidente del Centro Francés de Asuntos Políticos y Exteros, un laboratorio de ideas que suele organizar reuniones internacionales sobre temas de la agenda mundial.

Según el “WSJ”, la participación de Donald Trump Jr. en esa reunión alimenta polémicas sobre el papel de familiares del presidente electo en asuntos de Estado y los deseos de Trump de cooperar estrechamente con el presidente ruso, Vladímir Putin.

Kassis confirmó al periódico la participación del hijo mayor de Trump en esa cita y dijo que le había presionado sobre la importancia de contar con la cooperación de Rusia en conflictos de Oriente Medio como el de Siria.

“Sin Rusia, no podremos tener una solución en Siria”, declaró.

En un mensaje previo en su página de Facebook, Kassis había señalado que la oposición siria confía en que Rusia y EEUU puedan llegar a un acuerdo sobre el conflicto “gracias a la victoria de Trump”.

La que fuera jefa de campaña electoral de Trump, Kellyanne Conway, dijo que Trump Jr. sólo estuvo presente en una mesa redonda en París, y Kassis participó en esa charla y “en una cena en grupo para treinta personas” para analizar las elecciones de EEUU.

Las rivalidades entre Rusia y Estados Unidos han impedido hasta ahora avanzar en una solución para cerrar la guerra de Siria, a pesar de los esfuerzos realizados en la ONU para poner de acuerdo a todas las partes.

Entre otros temas, la Administración del presidente saliente de EEUU, Barack Obama, y el Gobierno de Moscú no se han puesto de acuerdo sobre el papel que puede tener el presidente sirio, Bachar al Asad, en una solución política para poner fin al conflicto.