La UE aplaza diferenciar los bienes de colonias israelíes, a petición de EEUU

A petición de Estados Unidos, la Unión Europea (UE) ha aplazado dar directivas claras a sus países miembros para diferenciar claramente en el etiquetado los productos procedentes de asentamientos israelíes en territorio ocupado, informa hoy el diario “Haaretz”.

Tras la aprobación de la medida el año pasado por los Veintisiete, el Consejo de Asuntos Exteriores de la UE tenía previsto aprobar la próxima semana pautas concretas sobre el etiquetado de dichos bienes, tal y como habían pedido el mes pasado trece países comunitarios, entre ellos España.

Sin embargo, el secretario de Estado de EE. UU., John Kerry, ha convencido a la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, de posponer la votación al menos hasta mediados de junio, cuando estudia proponer un plan para la reanudación del diálogo de paz entre israelíes y palestinos, precisa el rotativo, que cita fuentes diplomáticas europeas y destacadas fuentes oficiales israelíes.

Israel había pedido a Kerry que interviniese en el asunto y, según dos diplomáticos europeos, los representantes de EE. UU. argumentaron que la plena implementación de la medida podría dañar los esfuerzos para retomar las negociaciones, en suspenso desde 2010 y motivo por el que el secretario de Estado volverá a la región la próxima semana.

Kerry y otros importantes miembros de la Administración Obama habían contactado a Ashton, su equipo y a capitales europeas para frenar la aprobación de las directivas.

La UE tiene firmado con Israel un acuerdo preferencial del que queda excluida la producción procedente de territorio ocupado.

Esos productos deben ser debidamente marcados con su denominación de origen de forma que, al llegar a las aduanas europeas, se les apliquen las tasas pertinentes.

La mayoría de Estados miembros ha “fracasado” en esta tarea, según un informe difundido hace medio año por una veintena de organizaciones no gubernamentales (ONG) europeas, que desvela que los países comunitarios compran quince veces más producción de colonias judías en territorio ocupado que producción palestina.

Estas pautas claras, que ya existen en Reino Unido y Dinamarca, tienen también como objetivo que los consumidores sepan de dónde proviene el producto.