Uno de cada cinco conductores hace viajes largos sin descansar

El 20% de los conductores no realiza ninguna parada para descansar en viajes de largo recorrido y, entre quienes sí lo hacen, más de la mitad no siguen las recomendaciones de descansar cada dos horas o cada 200 kilómetros.

Son los datos que se desprenden del estudio presentado hoy por el RACE y la Asociación de Bebidas Refrescantes (Anfabra), con el apoyo de la Dirección General de Tráfico, para analizar los hábitos al volante de 1.000 conductores que realizarán este verano viajes largos.

El estudio, dentro de la campaña “Un refresco, tu mejor combustible”, constata que tres de cada diez conductores han sentido cansancio extremo en el viaje y que cerca de un 80 % reconoce haber sufrido somnolencia.

Frente a esto, son los menores de 34 años los que dan mayor relevancia a los efectos perniciosos de la fatiga, por lo que, según los datos de este estudio, el 62% de ellos aseguran que se intercambian al volante durante viajes de largo recorrido.

“Turnarse reduce el riesgo de accidentes y no es ninguna debilidad, como muchos conductores creen”, ha subrayado el director de seguridad vial del RACE, Tomás Santa Cecilia, durante la presentación del estudio.

A un día del inicio de una nueva fase del dispositivo especial de Tráfico por el verano -están previstos en julio y agosto más de 86 millones de viajes-, el RACE muestra su preocupación por algunos hábitos al volante entre los conductores, como el hecho de que un 20% reconozca que no para a descansar en viajes largos.

Aun más preocupante es que un 6% no se baje del coche ni siquiera cuando realiza trayectos de entre 500 y 1000 kilómetros.

En la presentación del estudio también ha participado el director del Centro Superior de Educación Vial de la DGT, Perfecto Sánchez, quien ha recomendado “tomarse el viaje con placer, como parte de las vacaciones, y tenerlo todo bien preparado”.

El informe también incide en que la falta de hidratación al volante aumenta en un 66% la agresividad de los conductores, provoca un 33% más de salidas involuntarias de la vía y reduce la concentración en un 27%.

“En las pruebas realizadas a los conductores se comprobó que, cuando conducían deshidratados, se adelantaba la aparición de la fatiga en un 50%, con la consiguiente pérdida de atención al volante”, explica el informe.

Por eso, las tres entidades que han elaborado el estudio y participado en la campaña aconsejan dormir suficiente antes del viaje, descansar cada dos horas o cada 200 kilómetros, hidratarse durante el trayecto y tomarse de forma relajada la conducción.