Protestas contra el plan australiano de trasladar refugiados a Camboya

Una decena de buscadores de asilo se han cosido los labios en señal de protesta por el acuerdo sellado entre Australia y Camboya para trasladar a personas con estatus de refugiado, informaron medios locales.

Según un grupo de activistas, además, los intentos de suicidio han aumentado en el centro australiano de detención de la isla de Naurú desde que la semana pasada el ministro australiano de inmigración, Scott Morrison, y el ministro de Interior de Camboya, Sar Kheng, firmaran el acuerdo.

Con frases como: “Estoy cansado, por favor, mátame”, “el suicidio es más dulce que la sucia política de Australia” o “sólo nuestros cadáveres podrán ir a Camboya”, los detenidos se reúnen para protestar varias veces al día, según se observa en las fotografías publicadas por el portal del canal de radio local “SBS”.

“Nos han dicho 'por favor, decirle al público australiano lo que está sucediendo con nosotros'”, dijo a la emisora Victoria Martin-Iverson, directora de Red de Acción por los Derechos del Refugiado.

El pasado martes, un grupo de senadores australianos instó a las autoridades a abrir una investigación para aclarar las denuncias de abusos sexuales contra mujeres y niños que presuntamente suceden en el centro de detención para inmigrantes de Nauru.

“Decid que nuestra mujeres y niños están sufriendo abusos físicos por parte del personal. Decir que amenazan a nuestras mujeres con la violación. Decid que nuestros hijos están siendo acosados sexualmente, con tocamientos y abusos físicos”, retransmitió la activista el mensaje de los buscadores de asilo.

Australia interna a los inmigrantes indocumentados que intentan alcanzar sus costas en centros de detención, incluidos dos en la isla papuana de Manus, y en el de Nauru para que tramiten sus peticiones de asilo.

El endurecimiento de la política migratoria de Australia también señala que aquellas personas que alcancen el estatus de refugiado tendrán que establecerse en estos países y sin posibilidad de vivir en territorio australiano.

El Gobierno de Camberra mantiene un fuerte secretismo en torno a la situación de estas personas y a las operaciones de la Marina para bloquear el paso a los barcos que intentan llegar a territorio australiano, pese a las críticas del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados y Amnistía Internacional.

Muchos de los inmigrantes han huido de conflictos como los de Afganistán, Darfur, Pakistán, Somalia y Siria, y otros que han escapado de la discriminación o de la condición de apátridas como las minorías rohingya, de Birmania, o Bidun, de la región del Golfo.