Robados tres ejemplares de la orquídea zapatito de dama en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido

El personal del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido (PNOMP) ha detectado el robo de tres ejemplares de la orquídea zapatito de dama, una especie en peligro de extinción protegida por las normas europeas, españolas y aragonesas, con presencia en unos pocos lugares del Pirineo aragonés, entre ellos en el Parque Nacional.

Durante los trabajos de seguimiento de una de las poblaciones de zapatito de dama (Cypripedium calceolus) realizadas la pasada semana, los trabajadores encontraron en el lugar de los tres tallos, localizados durante el año anterior, el rastro de una excavación con herramientas en su lugar. Se descarta de este modo la desaparición de la especie por un accidente natural.

“Este robo irresponsable afecta a la conservación de la biodiversidad en Aragón y priva del derecho de su disfrute a otras personas concienciadas”, han indicado fuentes del Parque Nacional. La observación de esta orquídea y de otras plantas silvestres es un atractivo que motiva a visitar los Espacios Naturales Protegidos de Aragón. El zapatito de dama tiene unas flores muy vistosas y atractivas, de hecho, es la orquídea europea con flores mayores. Por este motivo, las zonas en las que crecen reciben millares de visitas durante su floración, en temporada baja para los turistas, todo ello controlado por el Gobierno de Aragón.

Existe un Plan de Recuperación de esta especie en Aragón desde 2004, que contempla la recolección ilegal como una de las amenazas sobre esta especie. Este plan se aprobó mediante el Decreto 234/2004 de 16 de noviembre, del Gobierno de Aragón, y, precisamente, valora en 16.000 euros cada pie en concepto de indemnización por los daños y perjuicios a la flora silvestre. Es decir, se trataría de un robo valorado en 48.000 euros que conllevaría, además, sanciones administrativas incluso penales.

El zapatito de dama, Cipripedium calceolus (familia de las orquídeas), es un geófito rizomatoso, es decir es una planta que pasa el invierno enterrada en el suelo. Cada tallo mide entre 20 y 60 cm de altura, tiene hojas oval-lanceoladas, que abrazan el tallo. Pueden tener una o dos flores que son grandes, de alrededor de tres centímetros de longitud, pudiendo llegar hasta los nueve centímetros. Las cuatro piezas externas de la flor son de color marrón púrpura y están dispuestas en cruz, y el pétalo central es muy grande, sin espolón, de color amarillo, inflado y ahuecado en forma de zueco. Florece entre la segunda semana de mayo y la última de junio, según poblaciones y años.

Se trata de una especie de distribución norteña: se encuentra en América del Norte, Eurasia y Japón. En la región eurosiberiana llega por el oeste hasta los Alpes, Macizo central francés y Pirineos. En la Península Ibérica sólo crece en los Pirineos catalanes y aragoneses. Las localidades aragonesas constituyen el límite suroccidental de su área de distribución en Europa.

Es la única orquídea europea que tiene un pétalo central que funciona como trampa, que obliga a los insectos a pasar por un canal determinado donde primero dejan el polen que puedan traer de otra visita y en la salida se les adhiere el que han de portar hacia otra flor. Cada flor dura abierta entre 11 y 18 días.