Nací en Jaén, en 1984. Un sábado, en verano, a las doce del mediodía. Hasta los dieciocho años viví en un pueblo con dos castillos y muchos olivos. Estudié Periodismo en Madrid, donde pasé unos años muy divertidos y, contra todo pronóstico, conseguí terminar la carrera. Desde entonces voy y vengo, cogiendo trenes y autobuses, del sur al norte y viceversa. Vivo en Santander, desde donde me dedico a desmentir tópicos sobre los andaluces por toda la cornisa cantábrica.