La portada de mañana
Acceder
Puigdemont estira la cuerda pero no rompe con Sánchez
El impacto del cambio de régimen en Siria respaldado por EEUU, Israel y Turquía
OPINIÓN | 'Pesimismo y capitalismo', por Enric González

Londres pone fin a siete años con un viaje musical y festivo de homenaje a la llama

El símbolo y la música de 'Coldplay' ponen el cierre a la aventura olímpica y paralímpica de la capital inglesa

LONDRES, 9 (del enviado especial de Europa Press, Ramón Chamorro)

Un homenaje a la llama y su simbolismo puso fin este domingo 9 de septiembre a la aventura que Londres comenzó hace siete años, y que cerró con la celebración de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, estos últimos los encargados de forma definitiva de apagar el pebetero del Estadio Olímpico para dar el testigo a Río de Janeiro, próxima parada de la cita, por primera vez en Sudámerica.

Como sucediera en la Clausura del pasado 12 de agosto, los organizadores optaron por apostar por la música, con el grupo británico 'Coldplay' como eje de toda la ceremonia y con artistas invitados de la talla de Rihanna o Jay Z, y otra de sus tradiciones, los festivales de música, teatro y cine, para acabar con el viaje iniciado de forma turbulenta en julio de 2005, pero que finalizó definitivamente con la alegría por vivir que transmite el 'Viva la Vida'.

De este modo, la capital inglesa echa el cierre a su viaje, también reflejado en la importancia que dio a uno de los mayores símbolos del Movimiento Olímpico y Paralímpico, la llama, que también tuvo su 'festival', como fue titulado el espectáculo ('El Festival de la Llama'), dirigido por Kim Gavin, el mismo que en la Ceremonia de Clausura olímpica, y conocido, entre otras cosas, por organizar el concierto en memoria de Diana de Gales en el estadio de Wembley.

Con todos los atletas sentados alrededor del escenario y tras desplegar el 'Agitos', el símbolo de Movimiento Paralímpico, defendido por un grupo de 'Soñadores' del ataque de unos 'Diablillos del Viento', que querían expulsarlo del recinto y que cesan ante el poder de la llama, lo que sirvió de pistoletazo de salida a la ceremonia, con la salida de los abanderados, entre ellos el murciano José Antonio Expósito, discapacitado intelectual oro en el salto de longitud, representando a España, y la formación de un corazón, de un fuego por momentos protagonista absoluto, entre todos ellos.

'COLDPLAY' TOMA LAS RIENDAS.

Tras un pequeño parón para entregar dos premios honoríficos a dos atletas que han ejemplificado el espíritu de los Juegos, el irlandés Michael McKillop y la keniata Mary Zakayo, la presentación de los seis atletas elegidos para la comisión del CPI, entre ellos la española Teresa Perales y el reconocimiento a los 70.000 voluntarios, comenzó la esperada participación de 'Coldplay', con 'Us against the world' ('Nosotros contra el mundo'), y el inicio del otoño.

A partir de ahí, bajo los acordes de la música y las canciones del grupo de Chris Martin, las estaciones fueron pasando, el invierno, la primavera y, finalmente, el verano, la estación de los Juegos, con uno de los temas de la banda más representativos, el 'Viva la Vida', y la posterior retirada de la bandera paralímpica y con el alcalde de Londres, Boris Johnson, pasando el testigo a su homólogo de Río de Janeiro, Eduardo Paes, con el posterior espectáculo de lo que espera en Brasil.

Por último, tras los discursos, llegó el momento más emotivo de la ceremonia, el del apagado de la llama olímpica, honor que correspondió a dos de los deportistas británicos más destacados de la cita, la nadadora Ellie Simmonds, ganadora de cuatro medallas (dos oros, una plata y un bronce), y el atleta Joannie Peacock, campeón de los magníficos 100 metros (T44). Londres, la génesis de los Juegos Paralímpicos a mediados de los 40, los despidió para que aterricen por primera vez en Sudamérica.

Etiquetas
stats