La empresa catalana Balfegó acusa a la flota canaria de “ocultar” 10.000 toneladas de pesca de atún
El grupo catalán Balfegó ha manifestado en un comunicado que la flota canaria “oculta” que actualmente pesca 10.000 toneladas de túnidos, cuando reclama un incremento de la cuota del atún rojo, con “declaraciones populistas”.
Balfegó -con sede en L'Ametlla de Mar (Tarragona)- ha reaccionado así a las declaraciones de la Federación de Cofradías de Canarias, quienes afirmaron que la empresa catalana practica una pesca industrial que pone en peligro el atún rojo.
Las 10.000 toneladas citadas de atunes (patudo, rabil, listado y bonito) “doblan” la cuota total de 4.243,5 asignada a España para las capturas de atún rojo, según Balfegó.
España tiene una cuota de 4.243,57 toneladas de atún rojo para 2017, de las que 189 serán para los barcos canarios; el contingente nacional es utilizado en gran parte por la flota de cerco (a la que pertenece Balfegó) y por las almadrabas.
El director general del grupo catalán, Juan Serrano, ha lamentado la “percepción” de la flota canaria: “Demuestra el profundo desconocimiento de esta pesquería, de los organismos internacionales que la regulan y de los actores, que han contribuido a una pesca sostenible que ha recuperado la especie”.
“Este tipo de afirmaciones populistas evidencian el nulo interés por contribuir a la recuperación del atún rojo y, por ende, a asumir los costes de reestructuración que hemos tenido que asumir otras flotas; no es el arte el que destruye un recurso, sino la irresponsabilidad de quien lo maneja”, según Serrano.
Balfegó reclamó recientemente “seguridad jurídica” y criticó las “presiones” de la flota de Canarias para modificar el reparto de los cupos de atún rojo, a lo que los pescadores canarios respondieron diciendo que la firma catalana “ve peligrar sus privilegios”.
En este sentido, Serrano ha pedido al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente que “sea consciente” de los derechos actuales, no los supedite “a la negociación política” y “analice objetivamente la vacuidad de la solicitud canaria hacia una pesquería (atún rojo) que jamás pudo demostrar” con documentos.
Según el director de Balfegó, “las razones que respaldan las presiones actuales son claras; si bien esta especie nunca ha sido el objeto principal de su actividad, ahora quieren aprovechar la buena situación de sus existencias, una vez que los demás han asumido la responsabilidad y las reestructuraciones para recuperarla”.