Espacio de opinión de Canarias Ahora
Un continente abandonado: el ébola
Pasan los años y la gran olvidada continua siendo África. Pocos se acuerdan de los graves problemas de gran parte del África negra. Poseo cierta visión de ese continente desde hace 73 años, año 1941. En esa fecha una persona muy querida me contó anécdotas y vivencias ocurridas en algunos países. También en primera persona fui testigo de ciertos acontecimientos 54 años atrás, año 1960.
Mi padre fue un emigrante forzado por las circunstancias económicas y la paupérrima situación laboral de España después de la guerra civil. Emigró para unos cuantos años y permaneció yendo y viniendo 27 años, hasta 1968. Vivió años en pleno bosque, a muchos kilómetros de la civilización, cerca de rio Benito en Evinayon. Mucha gente de color se acercaba al poblado ya que jamás habían visto a un hombre o a una mujer blancos. En África se había establecido de manera normal, no evolucionar con el paso del tiempo, se quemaban etapas a gran velocidad. La civilización no se asimilaba poco a poco, había que hacerlo al taponazo limpio. No había tiempo para esas delicadeces. Igual se comían un pariente fallecido utilizando sus dientes afilados artificialmente, por ser costumbre de algunos pocos, como se asombraban con los silbidos de los aviones en el aire. Vivimos como otras muchas personas blancas, conociendo sus costumbres y forma de vida, de una población que en muchos casos no era mejor ni peor que nosotros. Aunque nos asombró la sencillez de sus costumbres, su amabilidad y su carácter infantil.
A los blancos siempre le preocuparon las enfermedades tropicales: la malaria, la fiebre amarilla, la filaria, los anquilostomas, la enfermedad del sueño o como también la llamaban la de la locura, entre otras. Con varias de ellas murieron personas negras y blancas. Otras enfermedades europeas acabaron con la vida de muchos seres humanos, dadas las deficientes condiciones sanitarias del país: tuberculosis, sífilis, tétano, etcétera. Era sin lugar a dudas una vida dura, sacrificada, pero muy llena de cosas nuevas, de personas distintas y de costumbres extrañas. La dictadura política que existía en nuestro país gobernaba con mano de hierro aquella colonia, en la actualidad República de Guinea Ecuatorial. Aunque para ser sinceros visitando el país en los años ochenta, me recordó la misma mano de hierro en su gobierno, me pareció un territorio más deteriorado en sus calles y edificios que en la época de la colonia. Actualmente dicen algunos que lo han visitado que ha mejorado con la fuente de ingresos del petróleo. Habría que valorar en qué medida se ha beneficiado la población ya que el sistema sanitario del país deja mucho que desear.
En Liberia, Monrovia, en los años cincuenta con un gobierno de su Real Majestad había un alto desarrollo económico y una forma de vida excelente solo para los ingleses. Me sorprendió el alto nivel del comercio, con establecimientos de buena infraestructura, excelentes instalaciones y personal de color elegantemente ataviados a la europea, dominando un inglés de muchos quilates. Los ingleses, muy ingleses ellos y ellas, los habían educado pero manteniendo el apartheid.
Las enfermedades contagiosas son realmente preocupante en los países africanos con grandes ciudades, mucha población que vive hacinada (caso de Nigeria el país más poblado de África con 177 millones de habitantes y su capital Lagos con 11 millones), con puertos y aeropuertos de mucho movimiento de pasajeros. Con un denominador común en muchos países, un sistema sanitario muy deficiente. De la época colonial a la actualidad bastantes países no han mejorado la mortalidad infantil, no han mejorado la esperanza de vida al nacer. Estamos hablando en muchos casos de cuarenta años o más de diferencia y teniendo en cuenta la evolución muy positiva del sistema sanitario en Europa en esos años trascurridos, no se ha realizado un esfuerzo por la mejora de la sanidad en el continente africano.
Se imaginan actualmente, ¿una epidemia en un país súper poblado como Nigeria? El continente Africano ha quedado abandonado con el paso del tiempo. En algunos casos estamos peor que hace cuarenta años.
¿Cuantos años han pasado desde que se detectó el ébola? Bastantes (según información de Wikipendia 38 años), pero es ahora, después de muchos, cuando un gobierno de un país desarrollado ofrece a la OMS (Organización Mundial de la Salud) una vacuna experimental contra la enfermedad. Canadá país de procedencia de la vacuna quiere con esa medida combatir el ébola y acelerar las investigaciones (publicación periódico el País del 12 de agosto). Han fallecido 1.069 personas según la OMS para que los países desarrollados se preocupen y se pongan nerviosos ante un problema que ven lejano geográficamente, pero ante la internalización del mundo tampoco es disparatada cierta preocupación. Países africanos como Guinea Bissau, Guinea Conakry y Kenia, son considerados en palabras de la OMS de alto riesgo. Ese último está en el ojo del huracán en la costa oriental de África dado que Nairobi es una plaza de primer orden en las comunicaciones internacionales. En el caso de España la OMS asegura que el riesgo de contagio es “prácticamente cero”, muchos creyentes rezamos para que esa afirmación sea cierta y se cumpla en su totalidad.
Según información de wikipendia, “el primer brote de la enfermedad tuvo lugar el 26 de agosto de 1976 en Yambuku, ciudad al norte del Zaire, actualmente República Democrática del Congo. El primer caso se dio en un profesor de escuela de 44 años que regresaba de un viaje del norte del Zaire. Su alta fiebre fue diagnosticada como un caso de malaria y se le administró quinina (.........) murió el 8 de septiembre de 1976, 14 días después”.
Recuerdo que en un viaje de pocos días a Senegal en el verano de 1996, no tuve la preocupación de tomar antipalúdicos (la quinina se ha sustituido por el resorchin) y a los pocos días de regresar comencé con fiebres altas e intermitentes en Canarias (yo era un palúdico desde los 7 años). Me trataron como una gripe normal (con paracetamol) después de una semana no remitía la fiebre y me auto mediqué con elevadas dosis de resorchin, curándome de forma inmediata. Si el mosquito anófeles que te pica estaba infestado serás palúdico toda la vida y más propenso a los ataques de malaria.
Pero la malaria si la tratas es una enfermedad benigna que nada tiene que ver con otras, aunque si no la cuidas te lleva a la muerte. Wikipendia informa: “en el infestado del ébola en el lapso de una semana aparecen en el cuerpo una erupción, frecuentemente hemorrágica. Las hemorragias se presentan generalmente desde el tubo gastrointestinal haciendo que el infestado sangre tanto por la boca como por el recto anal. La tasa de mortalidad alcanzando el 90%”.
Habría que señalar para tranquilizar que si no hay acercamiento y contacto con la persona infestada no es posible el contagio. Aunque el asunto en África es muy grave. Se sabe cómo se trasmite la enfermedad, los síntomas de esta y las consecuencias que llevan a la muerte. Pero incomprensiblemente con los adelantos científicos de la humanidad, recursos técnicos y de financiación, después de que se diera el primer caso hace 38 años, su curación está fuera de control. Inexplicable.
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