Sanidad canaria, hay soluciones (y 2)

En un primer artículo analicé los principales problemas que afectan a la sanidad canaria y que concentran las reiteradas quejas de profesionales y usuarios. Asimismo, desarrollé una parte del conjunto de medidas urgentes que Nueva Canarias (NC) ha planteado en el Parlamento para comenzar a revertir la actual situación. Presentada esta semana como moción, incluyendo interesantes aportaciones de otros grupos, obtuvo el apoyo de PSOE, PP, Podemos y ASG, más de dos tercios de la Cámara. Solo CC se abstuvo. La moción aborda cuatro grandes bloques: mejorar la asistencia sanitaria –ya analizado en la primera toma-, propuestas sobre personal del Servicio Canario de a Salud (SCS), planificación, organización y gestión y, por último, garantizar la suficiencia financiera.

Respecto al personal del SCS, consideramos esencial actualizar las plantillas orgánicas, incorporando a los más de 2.300 eventuales que se han consolidado en la estructura asistencial en los últimos años y que realizan su tarea en condiciones de precariedad. Su actual situación genera disfunciones en la gestión de los recursos humanos, en los derechos de los trabajadores y en la propia gestión presupuestaria.

En esa línea es imprescindible resolver la oferta pública de empleo de 2007. Asimismo, proceder a la convocatoria de una nueva oferta pública de empleo 2016/2017, con las plantillas orgánicas actualizadas, para reducir la interinidad del personal, que en Canarias duplica la media estatal de temporalidad.

Por último, en este capítulo incluimos una serie de medidas destinadas a recuperar los derechos laborales perdidos durante la crisis económica. Se debe abordar, entre otros asuntos, la reorganización de la jornada laboral, la carrera profesional, el régimen de incompatibilidades, la equiparación de los ratios de profesionales a la medias del Sistema Nacional de Salud en los distintos centros y un plan de formación continua del personal del SCS.

Planificación

Uno de los graves problemas de la sanidad canaria es la falta de planificación, organización y gestión, parámetros esenciales para un buen funcionamiento de este esencial servicio público. Reclamamos la puesta en marcha del II Plan de Salud de Canarias, garantizando su correcta implantación, seguimiento y evaluación. En especial, implementando los planes de cuidados paliativos, salud mental, cronicidad y de control de la diabetes, con gran prevalencia en Canarias y asociada a otras muchas enfermedades.

Desde Nueva Canarias consideramos que todos estos planes tendrían que encontrarse activos en 2017 para cumplir con el calendario que, en su momento, aprobó el Parlamento canario. Igualmente, planteamos la necesidad de acelerar el proceso de elaboración del III Plan de Salud, que deberá estar operativo a comienzos de 2018.

En la moción se abordan también los conciertos con la sanidad privada. En su prestación deben garantizarse a los pacientes los mismos criterios de confort, calidad y seguridad que se dan en los centros propios del SCS. Señalamos que en seis meses deben estar publicados los procedimientos de contratación para los acuerdos con el sector sanitario privado para procesos de hospitalización de corta y media estancia.

Además, se plantea implementar un plan de infraestructuras, equipamientos y mantenimiento en 2017, que debe incluir, entre otros objetivos, la finalización de los hospitales que están pendientes en distintas islas, la mejora y renovación de los equipamientos tecnológicos del SCS y el desarrollo de un programa integral de conservación y mantenimiento de instalaciones, que optimice su vida útil y mejore las condiciones laborales y la calidad asistencial.

También, nos parece importante que se potencien programas preventivos, como el del cáncer colorectal, de alta prevalencia, y en el que es muy eficiente el screening general a la población de riesgo; un programa que hoy se encuentra en proceso experimental en algunas zonas de salud.

Suficiencia presupuestaria

Pero garantizar un buen servicio público sanitario implica, asimismo, un conjunto de acciones destinadas a su suficiencia presupuestaria. Recientemente se han perdido varias oportunidades para dotar mejor a nuestra sanidad: en el crédito extraordinario de mitad de 2016 y, especialmente, con los 160 millones de euros procedentes del extinto Impuesto General por el Tráfico de Empresas (IGTE) que, Nueva Canarias intentó que se destinaran en buena parte a afrontar las grandes necesidades de la sanidad canaria. A lo que se opuso frontalmente el Ejecutivo de Fernando Clavijo.

Para que la sanidad canaria sea capaz de responder a sus retos más inmediatos es imprescindible disponer de un presupuesto adecuado. Por eso planteamos llevar a cabo las modificaciones de crédito necesarias en el presente ejercicio 2017 para dotar al SCS del presupuesto real en el año en curso. Como se sabe, el gasto real de la sanidad canaria este año estará muy por encima del gasto presupuestado, como ha venido sucediendo en anteriores ejercicios.

Igualmente, proponemos, que se establezcan créditos extraordinarios o suplementos de crédito que permitan disponer al SCS de los recursos económicos adicionales para implementar el conjunto de medidas y actuaciones incluidas en la moción aprobada y que el sistema sanitario público canario precisa de forma imperiosa.

En este marco global se plantea, asimismo, promover un gran pacto por la sanidad canaria entre todas las fuerzas políticas, sindicales, profesionales, sectoriales y ciudadanas, que recoja el compromiso común de trabajar por la excelencia del sistema sanitario público en las Islas.

La consecución de esos objetivos de mejora de la sanidad canaria va a depender, evidentemente, de que el Gobierno cambie la actitud demostrada hasta ahora y coloque a la sanidad como prioridad. Como solicitan sus profesionales y usuarios. Como le exigen con esta moción la inmensa mayoría de las fuerzas parlamentarias. Hay soluciones. Deben comenzar a aplicarse ya. El Gobierno no puede seguir mirando para otro lado.