Zerolo compra una tertulia

Ya conocemos la reacción oficial de Miguel Zerolo, senador del Reino por la gracia del Parlamento de Canarias, al reciente auto del magistrado Luciano Varela mandándolo al banquillo de los acusados por el caso García Cabrera. Lejos de dimitir, lejos de dejarse ya de huidas hacia adelante, ha optado por el contraataque: se ha comprado una tertulia en televisión. Y no una tertulia cualquiera en cualquier tele de tres al cuarto, sino en la de mayor audiencia en la isla de Tenerife, Mírame TV (315.000 telespectadores al mes, según la última ola de EGM). Lo ha hecho de la mejor manera para que todos lo entendamos, a través de su amigo, su socio, su más estrecho colaborador de antaño, Lucas Fernández, propietario de Plató del Atlántico, le productora de televisión más afortunada de las islas afortunadas, con unas instalaciones en el recinto portuario de Santa Cruz que ya la quisieran para sí algunas autonómicas que conocemos. Plató del Atlántico estrenará el próximo lunes, día 10, en la televisión de Manolo Artiles la tertulia El Cuartelillo, de 23.00 a 00.30, en plan late night show, justo tras el programa del propietario de la cadena. Para que no haya dudas sobre el enfoque que tendrá el espacio, sepan que los tertulianos fijos serán Hilario Rodríguez, el famoso concejal independentista, líder de la corriente de Coalición Canaria autodenominada Secundino Delgado y propietario de la marca registrada “a que te doy un tenicazo”; el columnista de El Día y amanuense de don Pepito Andrés Chaves; el presidente nacional del Partido Nacionalista Canario (PNC), Juan Manuel García Ramos, y el ex jefe de prensa del Cabildo de Tenerife durante la etapa de Ricardo Melchior, José Antonio Pérez, purgado tras la llegada de Carlos Alonso a la Corporación. Pérez ejercerá de conductor del programa, con capacidad también para intervenir en los interesantes debates que se suscitarán.

Hilario y Chaves, los sopranos

Los primeros rumores que corrieron por Santa Cruz cuando se anunció la irrupción de este programa de Plató del Atlántico apuntaban a que esta iniciativa vendría financiada por el entorno de Paulino Rivero, al que Zerolo habría pedido ese favor para así tener una tribuna desde la que sus más encendidos admiradores pudieran defenderle adecuadamente. Un rumor difícil de digerir si tenemos en cuenta que tanto Hilario Rodríguez como Andrés Chaves están claramente posicionados en contra del actual presidente del Gobierno, tanto por acción como por omisión, y a su vez, abiertamente partidarios de que a Zerolo se le perdonen todos sus pecados por el bien de Tenerife. Dado el carácter levantisco acreditado de estos dos tertulianos, el resto de la mesa sólo servirá para dar lustre (en el caso de García Ramos, poco dado por lo general a la escandalera) y un toque de profesionalidad y mesura, en el caso de José Antonio Pérez, que habrá de hacer verdaderos esfuerzos para que no se le note el cabreo que tiene tras su salida del Cabildo al renovar Carlos Alonso su equipo de comunicación. Es conveniente recordar que Hilario Rodríguez no sólo ha defendido públicamente a Zerolo, sino que además consiguió arrancar recientemente del comité local de CC de Santa Cruz un acuerdo por el que se afeaba al concejal de urbanismo de la ciudad, el socialista José Ángel Martín, haber pedido la dimisión del ex alcalde como senador por los casos de corrupción que acumula en el Supremo. Chaves, que ya ha transitado varias líneas de pensamiento, siempre adaptadas al gusto del firmante de sus nóminas y atenciones protocolarias, se sitúa ahora mismo exactamente en el pensamiento pepitiano, consistente, como hemos relatado aquí en alguna ocasión, en pedir para Miguel Zerolo la canonización y la nominación de una rotonda en el primer sitio disponible. Será un show digno de ver, así que ya lo estamos recomendando. De nada.

El policía que siempre estuvo ahí

Apoteósica jornada la de este viernes del juicio por el caso Grupo Europa, relatada con mucha precisión por nuestro compañero Alexis González, que se lo está comiendo entero cada día. Deponía el que fuera jefe de la Brigada de Información en los años en que estallaron los casos Faycán (Telde) y Góndola (Mogán), por lo tanto un funcionario conocedor de lo que afloró, de lo que dejó de aflorar y de lo que no afloró por la falta de profesionalidad de algunos. Su testimonio fue demoledor, pero no precisamente contra los seis imputados, sino contra el inspector de Policía que éstos quieren que declare en el juicio para reforzar su cada día más desvanecida estrategia de la conspiración contra el Partido Popular. La declaración de este comisario, ahora al frente de la Comisaría de Distrito Norte, no dejó títere con cabeza. Por si había alguna duda del bando en que juega el tan mentado inspector Vargas, su exjefe se encargó de aclararlo urbi et orbi: desconfiaban de él hasta el punto de sospechar que algo tenía que ver con que los investigados en Telde conocieran las pesquisas y hasta tuvieran en su poder fotocopias de la famosa libreta de Toñi Torres detallando los pagos a los concejales del grupo de gobierno. Tanto desconfiaron que lo acabaron apartando de la investigación y quitándole la jefatura de grupo, lo que se tradujo en una reacción virulenta que le ha conducido a presentar querella contra sus compañeros y contra el redactor-jefe de este periódico, el ya mentado Alexis González. Una querella tan increíble y disparatada como muerta de risa está, porque de ella nada se sabe desde que fue presentada en el año 2010. Y eso a pesar del denodado empeño que puso en su redacción el afamado abogado Warren Sánchez, uno de los más señeros ideólogos jurídicos de la estrategia de la conspiración. Su patrocinado, el inspector Vargas, quedó este viernes pitufeando in puris naturalibus, con alusiones concretas de su ex jefe a su comportamiento y a su presencia continua en la misma sala de vistas, donde ha actuado como asesor y correveidile de los imputados como si la vida se le fuera en ello.

¿A qué fue a Madrid?

En la Supercomisaría no se hablaba este viernes de otra cosa que no fuera la gala Drag y las andanzas del inspector Vargas. Sus compañeros se hacían eco de rumores sin confirmar que lo situarían ante el jefe superior, Valentín Solano, recibiendo de este una sonora bronca por su comportamiento, revelado por este periódico desde el principio, y por su entrevista con Antón Marín en la mesa del fondo de la cafetería del hotel Parque. Esos mismos rumores apuntan a que Vargas negó la existencia de esa reunión, pero las cámaras del hotel y nuestros testigos presenciales lo desmienten. Desde que las defensas de los acusados en el Grupo Europa empezaran a pedir su testimonio ante el desmoronamiento de sus tácticas conspirativas, Vargas dejó de aparecer por la sala de vistas. Su primera ausencia se registró este pasado jueves, coincidiendo con la declaración de Francisco Gordillo, el hombre del maletín de Toñi Torres. Una declaración que llamó poderosamente la atención de todos los presentes excepto de los abogados defensores, que ya conocían lo que Gordillo iba a decir. Y excepto de algún avisado periodista que acudió tras recibir un toque. Pero, ¿de quién? Ya sabemos que el inspector Vargas avisó al menos al delegado del periódico ABC en Canarias, Bernardo Sagastume, pero estamos por averiguar qué fue a hacer este intrépido policía a Madrid varias semanas antes de que Gordillo viajara desde esa ciudad a la de Las Palmas de Gran Canaria a romper con las declaraciones que precisamente había hecho en marzo de 2006 ante el mismo inspector de Policía. ¿Se han vuelto a ver desde aquella sonada detención? ¿Preparó Vargas con Gordillo su explosiva declaración del jueves? Sólo lo sabremos a ciencia cierta si en la sentencia se concede al fiscal anticorrupción su petición de abrir diligencias penales contra Gordillo por falso testimonio en juicio. Lo mejor que tiene esto es lo malo que se está poniendo para algunos que pasaban por allí. Y que metieron el jocico sin tener vela en el entierro.

TVE no se da por aludida

Ya ha contestado Televisión Española, con el estilo propio de la casa, a la queja formal de la Comisión Ejecutiva Insular del Partido Socialista Canario-PSOE por la “deriva (…) peligrosa hacia una televisión de partido, marcada por la parcialidad informativa y el desmantelamiento de la apuesta por la independencia, la pluralidad y la calidad consolidada por el PSOE entre 2004 y 2011”. Así se expresaron los socialistas canarios a través de una carta remitida al director regional de la cadena pública estatal en Canarias, Carlos Taboada, el pasado 13 de febrero, tras un episodio que les llenó la cachimba: en el especial realizado con motivo del quincuagésimo aniversario de la primera emisión de TVE en las Islas. Para tan señalada efeméride, el centro de producción regional entrevistó al presidente del Gobierno, Paulino Rivero; al del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, y al ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria. Por si no lo han captado, dos dirigentes del PP y uno de CC, por ninguno del PSOE o de cualquier otra fuerza política con representación parlamentaria. Sólo han protestado los socialistas, que en una carta de casi dos folios expusieron varios ejemplos concretos de sectarismo informativo como el tratamiento a las prospecciones petrolíferas de Repsol, el desprecio al pacto por la Educación recientemente suscrito, o la zafiedad con la que la cadena abordó el uso de coches oficiales mediante una pieza que acababa con Soria subiéndose a un utilitario de alquiler, como si fuera su hábitat natural. La carta del PSOE acababa pidiendo a Taboada que intercediera para corregir ese rumbo, quizás creyendo que el pobre director regional es un mandado cuando, en realidad, es el inspirador, ideólogo y comisario de esa estrategia de propaganda gubernamental.

El ministro, “por su condición de canario”

Taboada no respondió al PSOE, se limitó a enviar su carta de protesta a Madrid para que fuera la central de la Casa la que respondiera. Y la respuesta no pudo haber sido más parca e insultante. La firma el director de Comunicación y Relaciones Institucionales de TVE, Manuel Ventero Velasco, que en dos escuetos folios con faltas gramaticales se despacha la queja del segundo partido más importante de España, el tercero en Canarias en número de votos, donde co-gobierna con Coalición Canaria. Dice Ventero que de discriminación nada de nada, que la cadena pública estatal sigue tan virginal como cuando la dejó Zapatero, y que los informativos responden a “los mismos criterios de actualidad y representación institucional” de siempre (ja). Pasando por alto todos los casos y exigencias de la Ejecutiva Regional socialista, el portavoz de TVE explica la selección de invitados al especial del 50 Aniversario de TVE en Canarias con una absoluta tomadura de pelo: “Según nos informa la dirección del Centro Territorial [a buen árbol se arrimaron], la convocatoria de responsables políticos se limitó a una representación de cada una de las administraciones concernidas (sic), contando así con la presencia de don Paulino Rivero en su calidad de presidente del Gobierno de Canarias [en realidad escribieron presidente con mayúsculas y Gobierno con minúsculas], de don José Miguel Bravo de Laguna, como presidente del Cabildo de Gran Canaria, isla desde donde se emitió el programa especial [otra vez sic]…” ¿Y la presencia de Soria? ¿En qué concernía a Soria este programa? Pues vean cómo se sale el tal Ventero del atolladero: “Y don José Manuel Soria, ministro del Gobierno central [otra vez Gobierno en minúsculas y central en mayúsculas], en su condición de canario”. Como lo leen.