Pero no fue la noticia del Cenatic la única que conmocionó a los presentes en esa maratoniana reunión en el ministerio de Montoro. Casi al final de la cesión, los anfitriones quisieron sorprender a los representantes de las comunidades autónomas presentándoles a un nuevo cargo de la Administración central adscrito directamente a los servicios de La Moncloa. Se trata del director general de Tecnologías del Estado. Hubo que hacer un receso para digerirlo, momento que los directores generales de las periferias aprovecharon para ponerse de acuerdo y elegir a uno que preguntara a tan lustroso alto cargo por sus funciones. El designado para tan noble cometido fue el canario Roberto Moreno, director general de Telecomunicaciones y Nuevas Tecnologías del Gobierno regional. Tras desearle mucha paz y prosperidad por las navidades y por su nuevo destino, Moreno preguntó al homenajeado para qué va a servir ese nuevo departamento monclovita, teniendo en cuenta que ya existe en el Ministerio de Hacienda una Dirección General de Modernización y una Secretaría de Estado de Telecomunicaciones, además de Red.es y el ya condenado Cenatic. La pregunta causó cierto desencaje de mandíbulas por lo bajini de alguno de los presentes, verbigracia el representante de Castilla-La Mancha, que se contuvo como pudo. Pero esa contención se desbarató cuando el ponente soltó su respuesta: “Las funciones las va a desarrollar un real decreto que todavía no se ha escrito, cuando lo tengamos escrito se lo comunicaremos”. Ole.