Zapatero confía en que la UE reflexione sobre una medida similar a la de EEUU para la banca
BRATISLAVA, 14 (EUROPA PRESS)
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró este jueves que la Unión Europea debe hacer su propia reflexión sobre la introducción de alguna “medida similar” a la anunciada por el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, de imponer una tasa especial a las entidades financieras que operan en el país con el objetivo de recuperar el dinero empleado en rescate del sector, y recalcó que este tema “forma parte del debate” de los Veintisiete.
En una rueda de prensa junto al presidente de Eslovaquia, el socialdemócrata Robert Fico, Zapatero saludó la iniciativa del presidente estadounidense, ya que supone “un avance importante para el sistema financiero y para que funcione de manera más justa y mejor”.
Por su parte, el presidente eslovaco, Robert Fico, recalcó que los bancos han respondido de forma “feroz” a esta imposición. Por ello, se mostró partidario de una “iniciativa común” de todos los países europeos, ya que se trata de una “buena idea”, y confió en que se extienda por todos los países “tal y como se propagó la crisis económica”.
En este sentido, Fico señaló que, igual que los bancos suelen recurrir al Estado “en cuanto tienen problemas”, tiene intención de proteger a los consumidores a la hora de solicitar créditos.
El presidente de EEUU, Barack Obama, anunció este jueves que propondrá a los legisladores la imposición de un gravamen especial durante al menos los diez próximos años a las mayores y más apalancadas entidades financieras que operan en el país con el objetivo de recuperar “cada centavo” gastado por los contribuyentes en el rescate del sector, que, según los últimos cálculos del Gobierno, asciende a 117.000 millones de dólares (80.840 millones de euros).
Esta nueva tasa, denominada 'comisión por responsabilidad en la crisis financiera“, se aplicará sobre la deuda de aquellas entidades financieras que operan en el país con activos consolidados superiores a los 50.000 millones de dólares, con el objetivo de evitar el exceso de apalancamiento al imponer una tasa de 15 puntos básicos sobre los activos totales de las entidades, menos recursos propios.