El agua: un recurso bajo control
La Gomera se sitúa en estos momentos a la cabeza en cuanto a la planificación de uno de sus recursos más preciados: el agua. Y es que en la actualidad es la Isla en la que más se ha avanzado a la hora de cumplir todos los trámites para elaborar el Plan Hidrológico 2015-21. Un logro que no debe ser minimizado si se tiene en cuenta las cada vez mayores presiones de la Unión Europea (UE) para que Canarias culmine estos documentos. Los planes hidrológicos recogen la ordenación hasta en sus últimos detalles del agua y todo lo que se mueve alrededor de este mundo.
El presidente del Consejo Insular del Agua y del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo Curbelo, mantiene que efectivamente estos documentos se han convertido en los instrumentos adecuados para planificar el uso de un elemento como el agua que tiene una importancia capital en la Isla. “El objetivo no es otro que alcanzar un uso sostenible y que podamos atender a todos los sectores, tanto el primario como la industria pero sobretodo garantizar el consumo entre la población con agua en cantidad y calidad suficiente”.
Pese a la importancia del fin que se busca lo cierto es que en la actualidad La Gomera pueda dar por hecha esta complicada tarea hasta el punto de que cuenta con un abastecimiento del consumo que no genera sobresaltos. Ello es debido a que el agua que se extrae de los pozos del sur se puede transportar luego hasta el punto más alejado de la isla por un sistema de elevación desde los pozos. Además, los acuíferos se recargan con la lluvia horizontal que cruza el Garajonay con un agua de inmejorable calidad. “Desde el punto de vista hidrológico La Gomera es un pequeño continente”, indica.
En estos momentos se podría decir que ya prácticamente la Isla ha cumplido con su tarea; ahora son las otras instituciones a las que corresponde proceder a la aprobación definitiva del también conocido como segundo ciclo del agua. El avance será remitido en breve al Gobierno canario para que dé los pasos pertinentes que culminarán con el visto bueno final por parte de la Comisión de Territorio y Medio Ambiente de Canarias (Cotmac). Otro tanto ocurre con el avance Medioambiental y el Plan de Avenidas en el que se recogen los puntos en los que existe riesgo de inundación. Desde hace un mes el ejecutivo autónomo asumió la terminación de estos documentos y por lo tanto a partir de entonces el testigo deja de estar en manos de La Gomera.
Las previsiones más moderadas apuntan a que ya en este mismo ejercicio, si el ejecutivo autónomo lo estima conveniente, la Isla podría contar con su Plan Hidrológico que estará en vigor hasta el año 2021. El documento ha pasado por todas las etapas previstas y obligatorias. Entre ellas su exposición al público para que sea conocido y también reciba las aportaciones que se crean conveniente. Un paso al que la UE da una extraordinaria importancia en los últimos tiempos.
Pues bien, desde el Consejo Insular de Aguas de La Gomera se han consultado a un centenar de entidades, administraciones, instituciones o colectivos, entre ellos agricultores o comunidades de regantes. En este proceso el Plan Hidrológico recibió un total de 18 alegaciones que en su mayor parte han sido incorporadas al documento. De hecho, ninguna de ellas suponía una enmienda a la totalidad y por el contrario eran aportaciones que completaban y perfeccionaban lo ya recogido.
Uno de los aspectos en los que se ha hecho una especial incidencia es a todo lo referente al ahorro del agua como recurso que no se debe dilapidar ni derrochar. En este sentido ya hace meses que el Consejo comenzó a mover ficha y puso en marcha diversas medidas como el empleo de dosificadores en las llaves de los domicilios y la identificación de aquellos puntos de las red en los que se producían pérdidas. Otro tanto ha ocurrido con la imposición por primera de una tarifa específica al uso del agua en la agricultura y la actualización de la de consumo humano. Y es que la recuperación de costes se considera un objetivo prioritario.
El año de los cultivos abarca de octubre a octubre y lo cierto es que en el caso actual éste sólo puede ser calificado de muy seco. Por ello, la medida tomada ha resultado ser especialmente oportuna. Aunque en realidad siempre lo será. Sea cual sea el ejercicio en el que se aplique.
En el Plan Hidrológico, cuya entrada en vigor se estima muy próxima, se puede encontrar su definición y estructura para el abastecimiento humano, depósitos que existen para este fin, trazado de galerías, planos topográficos, geológicos, de climatología, una relación de los monumentos geológicos protegidos, de capacidad agrícola, de la vegetación, unidades ambientales, un catálogo del patrimonio arqueológico, etnográfico y arquitectónico, un mapa de riesgos naturales, un estudio de las presas o de la infraestructura hidrológica de la Isla, entre otros muchos aspectos.
En el documento se contienen también más de medio centenar de actuaciones que se llevarán a cabo contando con el apoyo del Gobierno de Canarias, Estado y la Unión Europea (UE). Entre ellas están la construcción de depuradoras, elaboración de normativa y estudios, puesta en marcha de sondeos como el de La Negra, eliminación de pérdidas en la red, adecuación de las presas a la normativa, mejoras de conducciones, programas de seguimiento medioambientales, control de invasión de especies exóticas o vigilancia sobre la ocupación de los barrancos.
Hay posibilidades de contar con financiación europea en el caso de la reutilización de las aguas provenientes de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Valle Gran Rey que servirá para cubrir el riego de los cultivos de este municipio y las zonas urbanas del casco. Todo ello dada la sobreexplotación de acuíferos en los meses de mayor uso. La obra ha sido declarada de interés general por el Gobierno canario y cuenta con un presupuesto de un millón de euros.
Resulta viable contar con financiación europea también en el caso de la ampliación de la EDAR de San Sebastián y más concretamente de la estación de bombeo y emisario submarino. Es un proyecto integral que pretende resolver los problemas de saneamiento de San Sebastián y cuenta con un presupuesto de dos millones de euros. También ha sido declarada de interés general por el ejecutivo autónomo. No obstante, dadas las buenas relaciones que existen en la actualidad con el Gobierno canario y el Estado, sería posible que se redujera la carga inversora de las instituciones de la Isla para llevar a cabo estas actuaciones, que en total pueden alcanzar los 30 millones de euros. Los Fondos de Desarrollo de Canarias (Fdcan) también podrán servir para estos fines. En cualquier caso las previsiones de inversión por parte de todas las administraciones son realistas y deberán llevarse a cabo una vez que el documento sea aprobado definitivamente.
El Plan Hidrológico también cuenta con los correspondientes mapas de riesgo de inundaciones. En el caso de La Gomera se han identificado tres puntos: la desembocadura de los barrancos en San Sebastián, Valle Gran Rey y Playa Santiago. En cuanto a núcleos con problemas por las tormentas marítimas estarían estos mismos más Alojera. En concreto, de lo que se trata es de valorar las posibilidades que existen de catástrofes en caso de desbordamientos de barrancos o por tormentas marítimas de especial intensidad. Las conclusiones son que este tipo de fenómenos se producen una vez cada quinientos años.
Las áreas que ya fueron seleccionadas en la fase previa incluyen la mayor parte del territorio con riesgo potencial, asociado a los episodios de inundación. Todos ellos están vinculados tanto a lo relativo a la red del drenaje territorial como a la seguridad de las personas o a lo referente a los daños económicos y afecciones al medio ambiente.
Al documento inicial se ha añadido el riesgo por inundaciones en la costa a causa de los efectos de las tormentas que han sido elaborados por la Dirección General de Sostenibilidad de Costa y Mar, Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.
Planificación y ordenación
El Plan Hidrológico se convierte en uno de los principales instrumentos de planificación y ordenación de todo lo referente al agua de la Isla. En el mismo convergen criterios territoriales y ambientales que se integran en un marco de elaboración y aprobación por etapas donde participan diversas administraciones con competencias en la materia. Los objetivos genéricos de estos documentos son conseguir el buen estado y la adecuada protección de las masas de agua de la demarcación, la satisfacción de las demandas de este elemento y el equilibrio y armonización del desarrollo regional y sectorial.
Estos fines han de alcanzarse incrementando las disponibilidades del recurso, protegiendo su calidad, economizando su empleo y racionalizando sus usos en armonía con el medio ambiente y los demás recursos naturales. “El nuevo Plan Hidrológico de La Gomera se guía por criterios de sostenibilidad en el uso del agua mediante la gestión integrada y la protección a largo plazo de los recursos hídricos, prevención del deterioro del estado de las aguas, protección y mejora del medio acuático y de esta clase de ecosistemas y reducción de la contaminación”, se indica en el documento.
Otro tanto ocurre con la apuesta para paliar los efectos de las inundaciones o sequías que se puedan producir. La Ley de Aguas de Canarias establece el ámbito territorial de la demarcación hidrográfica de La Gomera que comprende la zona terrestre y marina, hasta una distancia de una milla náutica mar adentro a partir de la línea base que delimita las aguas interiores o pleamares.