Disminuye la actividad sísmica en La Palma en las últimas 24 horas

El número de terremotos registrados en La Palma, “ha disminuido en gran medida” en las últimas horas. Así lo asegura el último informe del Instituto Geográfico Nacional (IGN), que ha contabilizado 66 seísmos en el último día en la zona afectada por la erupción volcánica de Cumbre Vieja. Seis de estos nuevos terremotos han sido sentidos por la población y el que ha alcanzado mayor intensidad ha sido uno que ha tenido lugar a las 3.22 horas de la madrugada de este miércoles, con una magnitud de 3,9, a 37 kilómetros de profundidad. Otros cinco temblores se han localizado a profundidades superiores a los 30 kilómetros y el resto de los hipocentros están a menor profundidad, en el entorno de los 12 kilómetros, según informa el IGN.

El director del Plan de Emergencia Volcánica de Canarias (Pevolca), Miguel Ángel Morcuende, ha repetido a lo largo de sus comparecencias diarias para informar sobre la evolución del volcán que estos terremotos no deben preocupar, al menos por el momento. Según las cifras extraídas por el IGN, gran parte de los sismos se han producido a profundidades elevadas, sobrepasando en muchos casos los 30 kilómetros de profundidad, por lo que el director del Pevolca ha restado importancia a estos temblores y ha subrayado en varias ocaciones que, por ahora, no hay ningún “dato que nos haga pensar que pueda haber un nuevo centro emisor”.

Este martes, se registraron 64 terremotos, seis de los cuales fueron sido sentidos por la población. Durante esa jornada, el de mayor intensidad fue un sismo ocurrido a las 07:16 UTC, con magnitud 3,9, a 12 km de profundidad. El lunes, sin embargo, fueron localizados 108 temblores, siete de ellos sentido por la ciudadanía.

El terremoto de mayor magnitud registrado desde el comienzo de la erupción fue el del pasado jueves localizado en Villa de Mazo, de magnitud 4,3 y a una profundidad de 35 kilómetros.

Por su parte, la altura de la columna eruptiva a las 6:30 horas UTC de este miércoles es de 3.000 metros y la red de estaciones permanentes GNSS de la isla muestra estabilidad en las deformaciones en las estaciones cercanas a los centros eruptivos, indica el IGN.