Trabajan para que el puerto de Tazacorte reciba veleros en ruta a América
El Gobierno canario y la concesionaria del puerto de Tazacorte negocian un acuerdo por el que esta última invertiría 4 millones de euros en 2018 para acondicionar el recinto con el objetivo de captar a los grandes veleros que parten desde el norte de Europa y el mar Báltico rumbo a América.
El consejero de Obras Públicas y Transportes, Pablo Rodríguez, aseguró este viernes en comisión parlamentaria que el citado puerto palmero es una instalación de primer nivel en una zona espectacular y una oportunidad para la isla, pero no ha logrado todos sus objetivos porque no se ha completado ni la obra ni la inversión. Donde sí se ha completado “funciona”, como es el caso de los 350 atraques en la zona del muelle deportivo, que alcanza un 75 por ciento de ocupación, una de los de mayores cifras de los puertos canarios, y el que más ingresos percibe en la recaudación de canon portuario.
Circunstancias sobrevenidas, como la crisis, alteraron los supuestos iniciales de la concesión del puerto, lo que obligó a una modificación presupuestaria y a reducir la obra, explicó el consejero, quien indicó que cabían dos opciones: o resolver el expediente, lo que podría llevar a su judicialización y la ralentización del muelle, o dialogar con la concesionaria para buscar una solución.
Por ello Gobierno y concesionaria mantienen contactos periódicos para estudiar proyectos alternativos y en ellos se ha llegado a la conclusión de que Tazacorte, por su situación, tiene una peculiaridad única e idónea para ruta de los barcos veleros que parten del norte de Europa hasta América.
Es un nicho de mercado con mucho potencial y por ello se intentará captar el tráfico de armadores que quieran poner a punto sus naves, además de ofrecer una actividad complementaria, la comercial, en invierno, cuando el puerto deportivo opera menos por las condiciones del mar, agregó Rodríguez.
“Es una oportunidad que ni debemos ni podemos perder”, subrayó el consejero, quien dijo que se tratará de firmar el acuerdo con la concesionaria antes de fin de año para que en 2018 se realicen las obras correspondientes, sin renunciar además a la parte comercial y de ocio que para el Gobierno canario es “innegociable”. Advirtió también el consejero que esto no se puede dilatar más en el tiempo “porque que se pierden oportunidades”, y una de ellas es que además en el puerto de Tazacorte entre en la programación de cruceros convencionales “sea con 100, 200 o 300 personas”.
Por el grupo Popular la diputada Lorena Hernández aseveró que le avergüenza como palmera ver a cada rato noticias de un muelle que ha sido “un despropósito” desde el principio, aunque se congratuló del acuerdo alcanzado con la concesionaria para un nuevo modelo de explotación.
Manuel Marcos Pérez, del grupo Socialista, afirmó no se debe dilatar en el tiempo la nueva propuesta, a la que hay que dar “prioridad” para que las obras estén culminadas en 2018, al tiempo que la parlamentaria nacionalista Guadalupe González Taño subrayó que el puerto de Tazacorte “pese a quien le pese, va bien”. Esther González, de Nueva Canarias, opinó que “entre pitos y flautas” hay demoras de diez años en los servicios del puerto, como la explanada comercial, los aparcamientos, el club náutico y los pantalanes. Por el grupo Podemos Francisco Déniz criticó la deficiencia en la planificación de grandes obras con las que “se enardece a la población” y en el fondo son “innecesarias” y no se sabe qué hacer con ellas, como los puertos de Granadilla y Arinaga “que luego nos volvemos locos a ver si buscamos un barco”. En su opinión, con el puerto de Tazacorte se engañó a la población de la comarca con un mal uso de dinero público en una zona que inicialmente era para cargar y descargar plátanos.