Unas escaleras o cintas mecánicas para la avenida El Puente

El tema de mejorar la movilidad ciudadana está cada vez más en la mente de nuestros dirigentes, ya sean concejales, diputados, congresistas, senadores, etc. Lo que sin duda es un reflejo de las demandas ciudadanas de cara a mejorar su calidad de vida (del ciudadano), que por otra parte la clase política antedicha asume con cierta atención, ya que sin duda les acarrea un nutrido número de votos en las siguientes elecciones.

Dicho esto, y tratando de centrarme en el objetivo concreto, podemos ver cómo en Santa Cruz de La Palma, hace unos años se instaló un ascensor entre el edificio de Correos y el Edificio Múltiple, para facilitar la comunicación de los vecinos de los barrios de San Telmo, La Luz, Calcinas, etc. Que me consta es muy beneficioso para ellos, acercándolos muchísimo a la parte baja de la ciudad, tanto en tiempo como en aminorar las dificultades de unas fuertes pendientes que hay. Muy beneficioso para todos, pero especialmente para las personas mayores, alguna de las cuales me ha expresado que si no fuese por ese ascensor, apenas podría acudir a la calle Real (centro neurálgico como todos sabemos de la ciudad), también llamada la calle más larga del mundo (por la cantidad de gente conocida que te encuentras y te paras a hablar, je).

Pues vinculados estos dos factores, la fuerte pendiente que tenemos en Santa Cruz y la avanzada edad de muchas personas que viven a lo largo de toda la avenida El Puente, ya me han comentado alguna de ellas la necesidad o conveniencia, las palabras son lo de menos, de instalar unas cintas mecánicas a lo largo de toda esta avenida, que sería muy factible de realizar con diferentes paradas a lo largo de toda ella, (hoy técnicamente está superado), facilitando así el uso al ciudadano en el tramo más necesario para su uso, y así hasta el Edificio de Los Molinos.

La justificación vendría dada por las mismas necesidades dadas para el ascensor, ya que muchas personas mayores no pueden bajar al centro de la ciudad por la dificultad de subir tanta pendiente, pues la guagua no es la misma solución, aunque ayuda, claro. Sería una manera de darle una gran mejora a la calidad de vida de nuestros mayores, y no olvidemos que, uno de los criterios más extendidos para evaluar la calidad de un país, es ver cómo tratan a sus mayores.

La implantación de estas cintas o escaleras ya es una realidad en numerosas ciudades del país, lógicamente aquellas con fuertes pendientes, yo las he visto en Vitoria, Bilbao, Santander, etc. Incluso recuerdo que concretamente en Vitoria las instalaron en una zona de gran protección urbanística (zona de La Almendra, cerca de la catedral), con lo cual creo que el tema de futuros informes municipales se podría solventar.

Pues eso es lo que quería plantear, si lo consideran las autoridades competentes. Por cierto, también se podría aplicar la misma medicina para los residentes en El Pilar y Santiago, de grandes pendientes. Ya lo decía Calderón… “los sueños, sueños son”.