“Podemos será una tribuna para denunciar los desmanes del caciquismo”
Podemos se ha convertido en la cuarta fuerza política de la isla de La Palma. “Si una cosa han demostrado los recientes comicios autonómicos y municipales, es que en la Isla comienza a operar un cambio”, según se informa en una nota de prensa. “La entrada de la opción política Podemos dibuja un nuevo panorama, esperanzador e ilusionante, que no estará, a partir de ahora, tan dominado por los partidos políticos de siempre”, subrayan. “Aún estamos bajo el efecto anestesiante de los datos, que para nuestra formación han supuesto la irrupción en las instituciones, con un consejero en el Cabildo”, aseguran. “Mucho mérito tiene un proyecto como Poemos, que nació en La Palma bajo el signo de grandes dificultades y con la intención de no imitar las formas obsoletas y los viejos comportamientos de la ineficaz política de los grandes partidos”, resaltan.
Añaden que “los 2.103 votos al Cabildo y los 2.703 al Parlamento marcan la hoja de ruta de nuestra organización. El hecho de haber traducido los votos conseguidos a la primera institución política de la isla en un consejero, envía un mensaje claro y directo a la sociedad palmera: hemos venido para quedarnos”, resaltan.
La formación ha agradecido “a las personas que depositaron su confianza en Podemos” y ha recordado que esta organización “no va a pactar sillones ni puestos, ni vamos a ser mayordomos de los poderosos, sino que nos vamos a convertir en los carteros de los y las ciudadanas. Si bien es cierto que un solo consejero nos coloca en una humilde posición, por fin se cuenta con una tribuna desde la que denunciar los desmanes del caciquismo en La Palma”, dicen. Explican que “el aumento de votos con respecto a las elecciones al Parlamento Europeo de hace un año, duplicando los apoyos recibidos, supone una buena señal de cara al afianzamiento de este nuevo proyecto político en La Palma, debiendo ahora de asentar unas fluidas relaciones con los movimientos sociales y la sociedad civil que permita la participación directa de las personas en aquellos problemas que les afectan, perdiendo el miedo a las presiones caciquiles”. “Ahora se trata de seguir trabajando para consolidar este proyecto de cambio político y social mucho más allá de las instituciones, por lo que deberemos establecer contacto con los distintos movimientos sociales que trabajan en la Isla”, concluyen.
