El castaño “se está comiendo” el monteverde de Breña Alta y amenaza a Cumbre Nueva
Califica el tema de “gravísimo” y asegura que “llevo denunciándolo desde hace varios años en el Cabildo y en la Reserva de la Biosfera”. El biólogo Arnoldo Santos, especialista en botánica, ha asegurado a LA PALMA AHORA que el castaño, una especie foránea, “se está comiendo el monterverde de Breña Alta y si no se actúa llegará hasta Cumbre Nueva, porque está subiendo por las laderas”. “Está claro que hay que hacer un estudio cuanto antes para analizar cómo se propaga y de qué forma se podría frenar su avance, aunque reconozco que la tarea no es fácil porque son varios kilómetros cuadrados los que ya se encuentran ocupados”. Insistió, no obstante, en que “algo tendremos que hacer porque la Isla no puede perder esa importante zona de monteverde, que tiene una biodiversidad tremenda”. El propio Santos tiene intenciones de establecer una comparación “con fotos de hace pocos años y actuales para constatar su progresión”.
Admitió que el bosque de castaños “es bonito, y podemos conservar parte de él, pero no se puede permitir que siga avanzando”. “Se propaga por el propio fruto, la castaña, pero también de forma subterránea a través de las raíces; su vía de propagación es enorme”, sostiene. “Los lomos de Breña Alta están invadidos, y son varios los kilómetros ya ocupados porque no hay aprovechamiento forestal, a diferencia de lo que ocurre en Breña Baja y Mazo, donde los vecinos siguen cogiendo el monte, lo que impide que el castaño avance”, dijo.
La única ventaja que tiene el castaño, un árbol caducifolio (que pierde su follaje), en comparación con “otras especies invasoras, es que no erosiona el suelo, porque produce tanta masa con la caída de las hojas que cuando llueve retiene el agua y no hay erosión”, señaló Santos. “Enriquece incluso el suelo, pero es una especie foránea que no aporta nada especial frente a lo que suponen nuestros montes –monteverde y laurisilva- porque está afectando a varios tipos de ellos, sobre todo a los que no están aprovechados”, subrayó. El castaño, añadió, “también es propio para la cría de hongos comestibles, pero eso es un beneficio indirecto que no compensa la destrucción del monte de laurisilva y de fayal-brezal”.
Este especialista en botánica considera que no se puede permitir que el castaño “sustituya al monteverde y a la laurisilva, que albergan una enorme diversidad de árboles, arbustos y plantas endémicas –algunas raras- asociada a un componente de vegetación con hongos y microorganismos, que desaparecen con la presencia de esta especie foránea”.
