‘Sabores de Garafía’: alimentos saludables a precio justo

Alimentarse de forma saludable poniendo en valor los productos locales y recuperando las tierras abandonadas y el agropaisaje es la filosofía del proyecto Sabores de Garafía, en el que participan 35 personas. “Nos hemos constituido como Sociedad Agraria de Transformación (SAT) y la iniciativa surge porque queremos hacer un aprovechamiento de todos los recursos naturales que tiene la zona”, ha explicado a La Palma Ahora Carolina Sánchez, gerente de esta SAT, ubicada en el entorno de San Antonio del Monte. “Pretendemos también activar la agricultura, recuperar las tierras abandonadas y que la gente se motive para seguir cuidando y limpiando sus terrenos; se trata de crear una economía circular en la conciencia de que podamos comer de manera saludable con lo que tenemos a nuestra disposición, sobre todo a precios justos para el agricultor y para el consumidor”, subraya, e insiste en que “se trata de valorar el producto local y la labor social de reactivar la economía, el agropaisaje y la riqueza agrícola”. 

La SAT Sabores de Garafía está formada por 35 socios. “Es una iniciativa que integra a personas de diferentes características, desde pequeños agricultores y agricultoras a otras que no cultivan pero son afines a la filosofía del proyecto y colaboran en otros aspectos, como puede ser el diseño, distribución o elaboración en fábrica”, detalla. “Mucha gente tiene frutales y ve en este proyecto una oportunidad para aprovechar toda la fruta de temporada”, dice. 

La oferta al consumidor se compone de “productos locales y de calidad, porque están cultivados sin utilizar ningún tipo de fitosanitario químico y son de temporada; recibimos aquí el producto fresco, tanto frutas como hortalizas y hierbas aromáticas, y el excedente lo deshidratamos, lo que nos permite conservarlo durante más tiempo y darle una segunda oportunidad de comercialización”, apunta Carolina. “Hemos rescatado la sabiduría de los abuelos, cómo se hacían antes todos estos procesos, y hemos intentado también innovar un poco”, añade. 

El producto estrella de Sabores de Garafía se llama Frutina. “Son cueros de fruta, aprovechamos todo el excedente de la fruta y hacemos unos cueros usando productos de temporada con una base de plátano, o de gofio y almendra, o con lo que tenemos en la zona”, señala. “Hacemos barritas energéticas y golosinas sanas que están dirigidas tanto a niños como a caminantes y deportistas; se pueden transportar fácilmente porque pesan y ocupan poco, son alimentos energéticos y saludables”, asegura, y subraya que “no utilizamos ningún tipo de químico ni añadido, solo trabajamos con frutas y hortalizas, y también con harinas de plátano verde y de yuca”. 

Los clientes de Sabores de Garafía tienen un perfil muy definido. “Son personas concienciadas con el consumo de productos locales y que quieren cuidarse, intentan alimentarse bien y están abiertas a nuevos productos”. En cuanto al ámbito geográfico, Carolina comenta que su clientela “vive en el municipio pero no es de aquí”. 

Los productos de Sabores de Garafía se venden también en el Mercadillo de Puntagorda y los deshidratados pueden adquirirse “en algunas tienditas de la Isla”. 

Después de poco más de un año de andadura del proyecto, Carolina afirma que “nos encontramos aún en una fase muy inicial, todavía estamos en una etapa de aprendizaje, colocándonos en el mercado; nos está costando con temas como la distribución y debemos desarrollar la presencia en redes sociales para afianzarnos un poco”. En cuanto a las dificultades que se han encontrado a la hora de poner en marcha esta iniciativa, no oculta que “aparte de los procesos burocráticos, emprender es complicado, emprender en el mundo rural es doblemente complicado, pero es que emprender en Garafía tiene un plus añadido de dificultad por el aislamiento y la distancia de los recursos y servicios”.