Canarias y Baleares quieren limitar la oferta de vehículos con conductor mediante una regulación propia
Los gobiernos de Baleares y Canarias, a petición de las patronales de taxistas de ambos archipiélagos, plantearán al Ministerio de Fomento el desarrollo de una normativa específica que limite la oferta en las islas de vehículos de alquiler con conductor, conocidos por las siglas VTC.
El conseller balear de Territorio, Energía y Movilidad, Marc Pons, y el viceconsejero de Infraestructuras y Transportes de Canarias, Onán Cruz, se han reunido este miércoles en Palma con representantes de tres asociaciones de taxis con los que han acordado solicitar el desarrollo del precepto de la Ley Orgánica de Transportes (LOT) que permite que ambas regiones tengan regímenes diferenciados del resto de España.
Los profesionales del taxi de Canarias y Baleares temen que los tribunales fallen en favor de las operadoras de VTC que han denunciado la restricción legal que establece que los conductores de vehículos de alquiler no pueden operar más del 20 % de su tiempo de trabajo fuera de las regiones para las que tienen concedidas las licencias.
“Se distorsionaría todo”, ha afirmado el conseller Pons sobre el posible impacto de una liberalización total del ámbito de actuación de las licencias VTC, que previsiblemente supondría el desembarco de miles de coches en Canarias y Baleares para aprovechar el incremento de la demanda en la temporada alta turística.
El dirigente balear ha destacado que la LOT “abre una puerta a la normativa específica” para la que se planteará una propuesta al Ministerio de Fomento que ambos gobiernos regionales tienen que definir desde el punto de vista jurídico.
Pese a abogar por una restricción de la oferta, Pons ha subrayado que los coches de VTC son “un producto necesario”, particularmente para atender la demanda de turistas con alto poder adquisitivo.
El viceconsejero canario ha indicado que la restricción de los vehículos de alquiler con conductor, fijada en su comunidad por normativa autonómica para que no haya más de 1 por cada 30 taxis, es una garantía de la “calidad” del servicio a los usuarios y una prevención del “intrusismo” en un sector estratégico para la economía.
Cruz ha eludido adelantar qué medidas concretas se solicitarán a Fomento y ha recordado que la iniciativa común con Baleares responde al “miedo” de los taxistas de que una liberalización del sector acabe, en el caso de su comunidad, con la aludida norma 1/30.
El presidente de la Federación Regional del Taxi de Canarias (Fedetax), Juan Artiles, ha puesto el acento en que la regulación propia del mercado del transporte terrestre no redundará solo en beneficio de su sector, sino también de las empresas de autocares y de alquiler de vehículos sin conductor.
El presidente de la Federación Independiente del Taxi de Baleares, Gabriel Moragues, ha explicado que los profesionales del transporte de los archipiélagos no tienen las condiciones para salir a competir a la península, y por tanto debe restringirse la llegada de empresas foráneas para competir en las islas.
Antoni Bauzá, dirigente de la Agrupación Balear del Taxi, ha abogado por cambiar la regulación para que sean los gobiernos autonómicos los que establezcan en número máximo de licencias VTC en función de las circunstancias particulares de cada región.