CC y PSC imponen sus cuentas con disidencias
No ha habido sorpresas, pese a las públicas disidencias internas en el seno de los grupos del Pacto de Gobierno, y los Presupuestos para el próximo año han salvado su primer escollo al ser rechazadas las dos enmiendas a la totalidad presentadas por los grupos Popular y Mixto (NC-PIL).
Ni siquiera la indisciplina de voto de dos nacionalistas palmeros, José Luis Perestelo y Nieves Rosa Pulido, al abstenerse en la votación de la petición de devolución pedida por el Grupo Mixto ha puesto en peligro las Cuentas elaboradas por el consejero de Economía y Hacienda, Javier González Ortiz.
“Avisé a mi grupo de que el Cabildo de La Palma y mi presidenta habían dicho que los Presupuestos eran malos para la Isla, así que he sido coherente y me he abstenido”, explicaba Perestelo en los pasillos de la Cámara tras la votación.
Una explicación que para algunos no está de más, teniendo en cuenta que la situación política palmera está viviendo unos días muy convulsos, con la moción de censura entre CC y PSC que ha descabalgado hoy mismo a la conservadora Noelia García de la Alcaldía de Los Llanos y la que en los próximos días hará lo propio con Guadalupe González Taño en el Cabildo para ser sustituida por el socialista Anselmo Pestana con el apoyo del PP.
Peligro de veto
Salvo Perestelo y Pulido, el resto de los diputados mantuvieron la disciplina de voto pese a que existe un anuncio público de que los dos diputados del PSC por Fuerteventura votarán en contra del Presupuesto si no incluye la totalidad de la partida para terminar el Hospital General, que el Cabildo de El Hierro, que preside el también diputado socialista Elpidio Armas, ha expresado su “enérgico” rechazo a las Cuentas regionales. Unas críticas que también se han oído en dirigentes nacionalistas de Fuerteventura y Lanzarote.
Habrá que esperar, por tanto, al trámite de enmiendas parciales para conocer si estas disidencias internas son encauzadas y CC y PSC pueden 'mover' partidas para contentar, en lo posible, las demandas de sus organizaciones insulares con el fin de evitar que se produzca un nuevo veto, como el que hicieron los herreños el pasado año con los Presupuestos de 2013.
Mientras tanto, el Pacto se ha garantizado que las Cuentas serán aprobadas el próximo 17 de diciembre, como estaba previsto, ya que el Parlamento no las ha devuelto para ser reelaboradas.
El Presupuesto asciende a 6.357 millones de euros, lo que supone un incremento de 69 millones y un 1,1% en relación al ejercicio anterior. El gasto social será el principal destino de las partidas ya que 7 de cada 10 euros se dirigen a la sanidad, la educación y las políticas sociales.
Durante su defensa, el consejero González Ortiz ha insistido en que su objetivo, pese a los recortes del Estado, es “reforzar el gasto social, impulsar el empleo y reactivar la economía”.
“Este presupuesto intenta que haya menos desempleados; más y mejores servicios públicos; más y mejores infraestructuras; más becas; más atención social, y mejores condiciones para nuestras empresas”, recalcó el consejero.
Inmovilismo y conformismo
Unas explicaciones que no convencieron a los conservadores, para quienes el Presupuesto es una plasmación del “inmovilismo” del Ejecutivo que preside Paulino Rivero y una “demostración de conformismo y falta de ambición”.
“Son unos Presupuestos para la crisis, no contra la crisis”, dijo el conservador Jorge Rodríguez antes de asegurar que las Cuentas “institucionalizan el estancamiento; son continuistas y conservadoras; unas cuentas para quedarse en la crisis, engañosas y poco ambiciosas”.
“No son una palanca hacia la recuperación económica, sino una excavadora que hunde las esperanzas de todos los canarios”, culminó.
Frente a este discurso, González Ortiz denunció la “falta absoluta de coherencia” del PP de canario, ya que ha sido el Estado el que ha restado en dos años 462 millones de euros en carreteras, 50 millones en infraestructuras turísticas y 40 millones en infraestructuras educativas.
También subrayó el consejero que frente a las críticas conservadoras de que los Presupuestos no crean empleo, ha sido el Estado quien ha reducido 17 millones en los fondos para políticas activas de empleo y ha desmantelado el Plan Integral de Empleo (PIEC) mientras que Canarias incrementa las partidas contra el desempleo hasta un total de 27 millones de euros en 2014.
En parecidos términos a los usados por el PP, el portavoz de Nueva Canarias (NC) en el Mixto, Román Rodríguez, afirmó que el proyecto presupuestario del Ejecutivo “no va a reactivar la economía, ni los servicios públicos porque es más de lo mismo”.
Para cambiar esa tendencia continuista, Rodríguez propuso una ambiciosa reforma fiscal que permita incrementar los ingresos por la parte de “los muy, muy ricos” y acabar con los recortes.
Unos ajustes que, pese a que el Gobierno aseguró que ya no existen en 2014, Rodríguez constató en el hecho de bajan las inversiones y el gasto social y se desmantela el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC).
Punto de inflexión
Los portavoces del Pacto durante el debate, Emilio Mayoral (PSC) y José Miguel Barragán (CC), incidieron, como González Ortiz, en que a pesar de que son unos Presupuestos todavía difíciles por la política de contención del déficit impuesta por el Estado y la sustancial rebaja de las inversiones de éste en las Islas, las Cuentas suponen “un punto de inflexión”.
Tras los duros Presupuestos de 2013, Mayoral incidió en que “se ha conseguido proteger el gasto social y garantizar la continuidad de los servicios públicos esenciales”.
Una idea en la que profundizó el consejero de Economía y Hacienda al afirmar que “por primera vez en esta legislatura afrontamos un Presupuesto que supone un cambio de tendencia, en el que no hay que abordar más recortes”.
