De la ilusión a la sobreactuación y la falta de altura en el inicio de la legislatura

Sesión constitutiva de la Cámara baja, que ha inaugurado la XI legislatura.

Macame Mesa

Las Palmas de Gran Canaria —

Expectación, ilusión, distancia, sobreactuación, falta de altura y comentarios malintencionados, son algunas de las impresiones de los diputados canarios de diferentes formaciones políticas tras el inicio de la legislatura, en la que el socialista Patxi López ha sido nombrado presidente del Congreso.

El diputado del Partido Socialista (PSOE) Sebastián Franquis se muestra satisfecho con el nombramiento de López, que resultaba previsible tras el acuerdo alcanzado con Ciudadanos y contar con la complicidad del Partido Popular (PP). A su juicio, el PSOE ha demostrado estar “en el centro a la hora de conseguir acuerdos”, mientras que el PP y Podemos han evidenciado su incapacidad en este aspecto.

Franquis confía en que el resto de fuerzas políticas sean capaces de llegar a acuerdos que “no pasan por imponer a otros sus propuestas”, como los cuatro grupos planteados por Podemos, que define como “una ilegalidad y ellos lo saben muy bien”. Aunque valora el mayor margen maniobrabilidad que aporta el no contar con mayorías absolutas, considera que hubo una “sobreactuación” anecdótica en el juramento de varios diputados - en mayor medida sentados en la bancada de la formación que dirige Pablo Iglesias - que en su opinión “sobraba”.

“Algún juramento o promesa parecía más una imposición que otra cosa y a veces algunos pierden la visión de que estamos en el Congreso de los Diputados, estamos representando la soberanía nacional y eso requiere mucho respeto a lo que expresa cada uno”, apostilla.

Algo que comparte el diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo – partido que acudió en confluencia con el PSOE a las elecciones y finalmente se sienta en el Grupo Mixto – que mantiene que “hemos vivido momentos en los que hay que darse cuenta que el Congreso de los Diputados es la casa de todos y no de un grupo solo y hay que tener mucho cuidado con respetar las intervenciones de los demás”.

Para Quevedo, las frases lanzadas en el momento del juramento pueden deberse a la “bisoñez” y confía en que se solucionen con el tiempo, porque “a mi lo que me preocupa es que se caricaturice la acción parlamentaria y la imagen del Congreso”, que podía pecar de “histrionismo” si se sigue repitiendo esta práctica.

Quevedo sostiene que la jornada despertaba una gran expectación e incertidumbre por la entrada de los grupos emergentes y lamenta que Podemos no haya pactado por una Mesa cuya composición considera como “matemáticamente razonable”, aunque “podía haber sido más plural”. Aún así, cree que se ha demostrado capacidad de consenso para escenificar el cambio político que a su juicio representa la designación de Patxi López.

La diputada de Podemos, Victoria Rosell, define la jornada como “emocionante”, con los representantes con ganas de “trabajar y cambiar las cosas” y recuerda el momento en el que salieron a la calle y un grupo numeroso de personas les animaron y gritaron “sí nos representan” y “sí se puede”.

Sin embargo, califica como “desagradable” la actuación desde la mesa de la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, que no dejaba a los diputados de Podemos terminar sus promesas y en “los abucheos y algunas frases que oímos de otros bancos, sobretodo del Partido Popular”.

Rosell, que esperaba un poco más de altura política, considera que parte de la reacción hostil ha servido a los partidos para demostrar su desagrado a un cambio que “ya se ha producido y que debe conllevar al cambio de dinámicas internas”. “Es curioso que den ese ejemplo de mala educación desde la Cámara hacia representantes elegidos por la ciudadanía”, apostilla.

Respecto al nombramiento de Patxi López, muestra su sorpresa por “ciertos pactos”, aunque considera que será una persona “más tolerante y dialogante que otros precedentes”. Asimismo, denuncia la actuación del PSOE en la Mesa del Senado, al ceder un asiento al PNV en vez de a Podemos, que considera “poco justificable” e “incongruente con lo que se ha dicho en el Congreso”.

La diputada de Coalición Canaria (CC), Ana Oramas, considera que la jornada de constitución de la Mesa ha sido “distinta” y con mayor pluralidad política, después de cuatro años de gobierno con mayoría absoluta del PP. Oramas no cree que haya incógnitas, porque “los números son los que son, las matemáticas en este caso no suman y las voluntades políticas desgraciadamente tampoco”.

En ese sentido, afirma que “hay gente que está en clave electoral, en intentar como sea que haya elecciones otra vez en base a los intereses de sus partidos” y que “no hay voluntad de acuerdo por ninguna parte”. Algo que cree que es “una pena”, porque ve puntos de encuentro a los que llegar, “pero para eso hace falta talla y altura política y creo que en este momento se está en claves personales de intereses de partidos y no del país”. “Vamos a ver como empieza la legislatura, que yo creo que va a ser muy corta”, puntualiza.

El diputado de Ciudadanos, Saúl Ramírez, define la jornada como “ilusionante” y fija los pasos a seguir como la necesidad de llegar a acuerdos para llevar a cabo las reformas que “necesita la ciudadanía”. Ramírez manifiesta que la formación naranja “está demostrando que tiene la cintura para poder negociar y pactar tanto con el PP, como con el PSOE, como con –esperamos- Podemos y esperamos que la cordura y el sentido común lleguen al Parlamento, ya que hemos visto hoy que va a ser muy convulso y difícil llegar a acuerdos”.

Etiquetas
stats