Paulino Rivero y Román Rodríguez debatirán sobre la Ley del suelo en Lanzarote
El próximo jueves 3 de noviembre, a las 20.00 horas en la sede de la Fundación César Manrique en Tahíche tendrá lugar la celebración de la Mesa redonda ¿Ley del suelo? Canarias no es un solar. Presidentes por un territorio sostenible en la que intervendrán los expresidentes del Gobierno de Canarias Paulino Rivero y Román Rodríguez, y el expresidente del Cabildo de Lanzarote Enrique Pérez Parrilla.
En el acto se leerá, además, un texto remitido por Tomás Padrón, expresidente del Cabildo de El Hierro, invitado a participar en el acto como ponente, que no ha podido desplazarse a Lanzarote finalmente. La mesa será moderada por el director de la FCM, Fernando Gómez Aguilera.
El acto se integra en las diferentes actividades que la Plataforma ‘Por un territorio sostenible. Canarias no es un solar. No al Proyecto de Ley del Suelo’, en la que está integrada la FCM, organiza en las Islas para debatir en torno a la Ley del Suelo, pedir su retirada y “sentar las bases de un nuevo proceso que aborde una Ley sustentada en la participación ciudadana real y en una ordenación del territorio sostenible”.
En esta Plataforma, numerosas organizaciones ecologistas, sociales y culturales de todo el Archipiélago, junto a sindicatos, partidos políticos y diversas personalidades de la sociedad canaria, “han unido esfuerzos para frenar el Proyecto de la Ley del Suelo impulsado por Fernando Clavijo, pedir su retirada inmediata, y reclamar un nuevo proceso participativo y legislativo que concluya en una Ley del Territorio (que no del suelo) con ambición de sostenibilidad y futuro en beneficio de Canarias, del conjunto de sus ciudadanos y de las generaciones venideras”.
Para sus integrantes, el Proyecto de la Ley del Suelo supone “una extraordinaria amenaza para el paisaje, el suelo rústico, el patrimonio natural, la racionalidad urbanística, la integridad territorial y social de las Islas y la calidad de vida de los ciudadanos”. A juicio de la FCM y de la Plataforma, “su aplicación abrirá un nuevo ciclo desarrollista, especulativo y de inseguridad y conflictividad jurídica en el Archipiélago”.
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