Senadora por sorpresa

María Alemán, senadora de Podemos por Gran Canaria. (ALEJANDRO RAMOS)

Iván Suárez

Las Palmas de Gran Canaria —

El caso de María Alemán puede considerarse el paradigma del empoderamiento ciudadano prometido por Podemos. Impulsada por el espíritu que emanó del movimiento 15-M, la formación morada adoptó desde su fundación un discurso basado en el concepto de democracia participativa y en el anhelo de la “conquista de las instituciones” por parte de la ciudadanía. Y fue eso, “la posibilidad de participar y formar parte del cambio”, lo que enganchó a Alemán al proyecto desde la primera asamblea del círculo de Podemos en Las Palmas de Gran Canaria y lo que la animó a dar los pasos que al final la han conducido a ocupar, contra todo pronóstico, incluido el suyo, un escaño en el Senado tras obtener 101.814 votos, el 13,15% de los sufragios de la circunscripción de Gran Canaria, en las elecciones del 20 de diciembre.

Nacida en Telde hace 49 años, la nueva senadora ha trabajado los últimos quince en el grupo empresarial Constant, experto en el área de Recursos Humanos, como responsable de Administración. Alemán es técnico superior en Análisis y Procesos Básicos, estudios que cursó en el Instituto Politécnico situado en la calle Canalejas de la capital grancanaria. Antes de entrar en Podemos, no tenía experiencia en política ni había militado en ningún partido. “He participado en muchas movilizaciones, en todas las luchas sociales que se han emprendido en Canarias, y también he colaborado con organizaciones como Cruz Roja”, detalla como carta de presentación activista.

Alemán acudió sola a la asamblea fundacional del partido de Pablo Iglesias en Las Palmas de Gran Canaria. “Entré como gran parte de las personas que hoy forman Podemos. Soy una ciudadana de a pie que hasta ahora lo que ha hecho ha sido trabajar para intentar llegar a final de mes y sobrevivir a los cuatro últimos años del Partido Popular, cansada de que nada cambie”. Pronto se involucró en una organización que aún carecía de estructura. Comenzó en el área de Comunicación y formó parte del Consejo Ciudadano de Las Palmas de Gran Canaria.

El pasado verano, tras un año y medio “intentando trabajar en todo aquello que se podía” dentro del partido, Alemán decidió dar el paso y presentarse a las primarias para elegir a los candidatos al Senado. Lo hizo en la plancha de En Canarias Decidimos, una lista en la que también figuraba el activista José de León (conocido popularmente como Pepe el uruguayo), fundador del colectivo Ben Magec y de la plataforma Salvar Veneguera. En Canarias Decidimos competía con Claro que Podemos, opción que encabezaba otro destacado ecologista, Eugenio Reyes, también de Ben Magec, y que representaba al denominado sector oficialista, próximo a la secretaria general de la formación en Canarias, Meri Pita, elegida diputada en los pasados comicios generales.

A pesar de concurrir con caras más reconocibles y reconocidas en los círculos progresistas de Gran Canaria, con personas que cuentan con una amplia trayectoria en el activismo social, María Alemán fue la aspirante más votada en estas primarias. Logró el respaldo de 1.523 votantes (el 47,24%), superando a Manuel González Mauricio (1.495) y a su compañero José de León (1.467). Por su parte, el cabeza de lista de Claro que Podemos obtuvo 1.204 apoyos.

Algo similar ocurrió el pasado 20 de diciembre. María Alemán reconoce que la sorpresa fue doble. En pugna con “fuerzas políticas históricas” y con sólo tres escaños en juego en Gran Canaria, veía “muy complicado” que Podemos pudiera obtener representación por esta isla en la Cámara Alta. Pero además consideraba que, de salir, tenía “muchas más posibilidades” José de León. “Sinceramente, sí me sorprendió. Él es un activista con un prestigio reconocido, pero es la ciudadanía la que decide. De todos modos, es un compañero que seguirá colaborando activamente”, asevera.

Alemán superó en casi 8.000 votos a De León y en más de 20.000 a los candidatos de la coalición PSOE-NC (Juan Díaz y José Miguel Rodríguez). Los socialistas ocupaban el tercer escaño de Gran Canaria que ahora les ha arrebatado Podemos. De los dos aspirantes del PP, Francisco de Borja Benítez de Lugo y María del Carmen Hernández Bento, la separó una distancia de entre 14.000 y 16.000 votos.

Un camino a contracorriente

Un camino a contracorrienteCon su irrupción en el Senado, Alemán comienza trazando un camino a contracorriente en el escenario político español. Se estrena en una cámara que el propio líder de su partido, Pablo Iglesias, ha definido como “cementerio de elefantes políticos”, un lugar donde deberá lidiar con muchos veteranos de los partidos que deciden convertirlo en su refugio en los últimos años antes del definitivo retiro. “Quienes decidimos presentarnos al Senado (por Podemos) coincidimos en que hasta ahora ha sido una cámara que no tiene sentido, que ha sido inoperativa, pero consideramos que para poder realizar cambios, es necesario estar dentro. Si creemos en una cámara territorial que sea efectiva y eficaz y que contemple las diferencias entre los distintos territorios y sus propias singularidades, tenemos que estar”, sostiene.

Alemán aboga por una Cámara Alta “mucho más operativa y menos costosa”. Podemos propone reducir el número de senadores, de los 250 actuales hasta un máximo de 70, y recortar los aproximadamente 50 millones de euros anuales que cuesta. Para ello, sin embargo, se topará con un obstáculo prácticamente infranqueable: la mayoría absoluta del PP en el Senado. “Evidentemente es complicado, pero no podemos olvidar tampoco que tenemos representación en el Congreso, queremos trabajar de manera conjunta”, precisa.

De la senadora de Podemos, los ciudadanos de Gran Canaria pueden esperar, según sus propias palabras, “compromiso con el programa de las islas y mucho trabajo”. “Intentaré reflejar la situación social y económica de Canarias, estamos a la cola de todos los indicadores económicos. Tenemos un 30% de paro y grandes índices de desigualdad”, manifiesta Alemán, que reitera la necesidad de trasladar a la Cámara los temas territoriales “y hacer que se contemplen” en la agenda estatal.

De sus primeros días como senadora tras prometer el cargo el pasado 13 de enero, Alemán destaca el carácter “excesivamente protocolario” de la Cámara Alta y se muestra sorprendida del ruido mediático que se generó en torno al partido tras esa sesión constitutiva, con el bebé de Carolina Bescansa o las rastas de Alberto Rodríguez como protagonistas: “Ha sido un poco surrealista. Al final terminas pensando que son estrategias para desviar el foco de atención de lo que realmente importa”, ha manifestado Alemán, que recuerda que Podemos ha presentado en el Congreso de los Diputados la denominada Ley 25 de Emergencia Social, una iniciativa inspirada en el artículo 25 de la Declaración de los Derechos Humanos, que pretende que todos los ciudadanos tengan un nivel de vida adecuado. “De eso nadie comenta nada”.

Para la representante de Podemos, estas polémicas que surgieron en la sesión del día 13 son también “una forma de tapar las vergüenzas” de otros partidos. “No entiendo cómo se pueden escandalizar ante las rastas de un compañero o por el bebé de Bescansa y no hacerlo con Gómez de la Serna, que está imputado por corrupción”, agrega.

En Madrid de lunes a jueves

Alemán ha asegurado que los senadores de Podemos de fuera de Madrid permanecerán en la capital de lunes a jueves con la intención de acometer un trabajo “intenso” en la sede parlamentaria, según han consensuado con el portavoz de la formación en la Cámara Alta, Ramón Espinar. “Para nosotros, lo importante es que esas cuestiones que hasta ahora no se han trabajado, que son de sentido común y que han estado fuera de las instituciones, se vayan abriendo paso, que más tarde o más temprano construyamos un nuevo modelo de país”.

La senadora por Gran Canaria considera que la política “no debe ser una profesión” y, por ello, no impone plazos a su incipiente carrera. “Debemos estar cuando aportamos y cada uno debe valorar su actividad”, concluye.

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