Fuerteventura alega que el decreto ha caducado
El Cabildo conejero pide que se de marcha atrás en la aprobación de las prospecciones ante la inseguridad medioambiental y los fallos en la tramitación.
El Cabildo de Fuerteventura alega que el borrador de Real Decreto por el que se autorizan las prospecciones de Repsol frente a las costas de las islas está caducado. La institución insular ha remitido un escrito a la Dirección General de Política Energética y Minas del Ministerio de Industria y Energía en el que solicita que se suspenda la tramitación del documento y se detenga su aprobación, no solo porque no corresponde a las fechas actuales, también porque presenta defectos en su tramitación y no arroja luz sobre las incertidumbres en seguridad medioambiental.
El presidente del Cabildo conejero, Mario Cabrera, ha insistido, en un comunicado, en que el ministerio, que dirige José Manuel Soria, “debe suspender definitivamente ya” la aprobación de las prospecciones. “Ni administrativamente, ni socialmente, ni económicamente, ni ambientalmente está justificado”, ha dicho. “Fue un error seguir adelante, lo que no es bueno para Valencia ni Baleares, tampoco es bueno para Canarias”.
Según la institución insular, no tiene sentido aprobar un decreto que concede unos permisos de prospección que cuya ejecución estaba prevista para 2006. El borrador del decreto, cuyo trámite fue paralizado por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, fue redactado hace diez años, cuando Repsol solicitó los permisos para comenzar las investigaciones en aguas canarias, tras detectar la posible presencia de bolsas de gas y petróleo en el límite con las aguas territoriales marroquíes, donde ya han comenzado las exploraciones.
El escrito presentado solicita, al menos, iniciar “la tramitación de un nuevo procedimiento de autorización”, lo que supondría revisar todo el documento, actualizar las fechas y la inversión, ya que, según denuncia el Cabildo, las partidas que contempla el documento no se ajustan al aumento del precio del dinero, ya que están concebidas para hace diez años.
Defectos de forma
Entre las alegaciones se incluyen, además, otros fallos en la redacción del documento, recogidos, además, a posteriori, es decir, después de que se pusiese sobre la mesa el primer borrador (el que ahora pretende aprobar el Gobierno está modificado). En este sentido, critican la falta de criterio y certeza en expresiones recogidas como “se perforarán al menos dos pozos”. “Con dicha redacción parece evidente que quedará a voluntad de Repsol la construcción y perforación de cuantos pozos considerara oportuno”, denuncia.
Inseguridad medioambiental
El Cabildo también se refiere a las directrices europeas sobre protección medioambiental que consideran que el marco reglamentario de los países miembros de la Unión Europea es aún insuficiente para poder garantizar la seguridad del ecosistema donde se produzcan perforaciones petrolíferas. “Las normas de funcionamiento existentes no garantizan la acción de emergencia más efectiva en caso de accidente en aguas de la unión y la atribución de responsabilidades en relación con el saneamiento y los daños convencionales no está totalmente clara”, cita el escrito enviado a la Dirección General.
Por último, recoge el impacto pejudicial que la contaminación acústica provocada por la instalación de las plataformas y la actividad de prospección podría tener en el ecosistema marino, provocando daños en las especies animales, algunas de ellas protegidas o en peligro de extinción, y la destrucción de los bancos de pesca humana, como los atuneros.
