CC, PP y la concejala tránsfuga de Santa Cruz de Tenerife votan en contra de crear una comisión que investigue el fiasco del Museo Rodín

El pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha rechazado este viernes, con los votos en contra del Gobierno local (formado por CC, PP y la concejala tránsfuga Evelyn Alonso) y a favor de PSOE, Cs y Unidas Podemos, la creación de una comisión de investigación para esclarecer la negociación para implantar en la ciudad un Museo Rodin, que tenía un coste inicial de 16 millones de euros y que finalmente fue descartado por los propios promotores de París.

El portavoz de Unidas Podemos, quien presentó la moción, Ramón Trujillo, ha criticado la “falta de transparencia” en la tramitación del proyecto y cree que la comisión de investigación es pertinente para que no se vuelva a reproducir este caso en iniciativas similares.

Ha dicho que se han gastado casi 40.000 euros en un proyecto que ha quedado truncado y ha cuestionado que se solicitaran informes económicos de viabilidad a tres personas con vínculos profesionales entre ellos.

Ha recordado también los “fracasos” de otros Museos Rodin en otras partes del mundo y se ha apoyado en el manifiesto suscrito por el sector cultural para advertir de la inviabilidad de retorno económico de una inversión de 16 millones de euros, con previsiones “fantasiosas”.

Trujillo ha indicado que sería una inversión “a fondo perdido” y necesitaría nuevos aportes económicos para que el museo siguiera abierto y no entiende cómo se le pudo “colar” al Ayuntamiento el informe de la tasación a través de una empresa en suspensión de pagos y liquidación judicial.

En su opinión, ambos informes, tanto el de viabilidad económica como el de tasación, han sido una “chapuza”, aparte de que el de previsiones de impacto económico estaban hechas antes de ser encargado. “Es un proyecto impresentable”, ha resumido.

Matilde Zambudio, portavoz de Cs, ha comentado que el Gobierno local ha dejado “muchas cosas sin resolver” tras la suspensión del proyecto, ha criticado que se tramitara por la vía de urgencia y ha preguntado si había otras alternativas a este museo. “El proyecto es un disparate”, ha agregado.

Patricia Hernández (PSOE) ha criticado que el alcalde, José Manuel Bermúdez, sin “ser economista”, supiera el impacto económico del proyecto sin haberlo encargado, y al igual que Trujillo, censuró que se buscaran tres ofertas a tres profesionales vinculados laboralmente.

Ha dicho que se descartó el uso de fondos europeos para el proyecto porque la fiscalización de los Next Generation “es más elevada” y ha lamentado que “todos hayan cobrado” de un proyecto que finalmente no se va a realizar.

“Mucha gente ha cobrado una regalía con algo que no fue”, ha señalado.

Hernández ha tildado irónicamente de “maravilloso” que el concejal de Hacienda, Juan José Martínez, sepa “más de arte” que la Facultad de Bellas de Artes de la Universidad de La Laguna (ULL), ha descrito el informe económico como “de fantasía” y ha recordado que fue el sector cultural, no la oposición, “quien paró” el proyecto por “unanimidad” y pese a las “llamadas” del entorno de CC a representantes de la cultura para que se posicionasen.

CC se aferra al informe económico

Martínez ha lamentado que la ciudad haya perdido un proyecto que iba a generar actividad económica y empleo y fortalecer su imagen internacional, pero entiende que la oposición también ha perdido porque se ha quedado “sin tema y sin argumentos”.

Ha afeado a PSOE y Unidas Podemos que pidan una comisión de investigación en el Ayuntamiento cuando negaron siquiera el debate en el Parlamento sobre el caso Mascarillas. “¿No se les cae la cara de vergüenza?”, ha dicho, y se preguntó por qué no han pedido una sobre los contratos de escenario del Carnaval, en la época de gobierno de Patricia Hernández, que están en manos de la Fiscalía.

Ha advertido del “coste reputacional” para la ciudad de la campaña de “mentiras” sobre el Museo Rodin cuando había obras originales e inéditas y el proyecto se presentó a toda la comunidad cultural de la capital con “total transparencia”. Sin embargo, fue la propia institución del Museo Rodín de París la que paralizó el proyecto después de saliera a la luz no solo que se trataba en su mayoría de copias de obras, y no de originales, sino los vínculos entre quienes habían hecho la tasación, el informe económico y el propio grupo de Gobierno del Ayuntamiento, sumado al rechazo del mundo cultural isleño, que desde el principio ha defendido que nunca se le consultó nada sobre el proyecto.

El portavoz del PP, Carlos Tarife, ha afirmado que su grupo siempre defendió que el proyecto saliera con “consenso” del sector cultural. Sin embargo, esta postura la manifestó públicamente solo cuando ya habían surgido las críticas y el abrumador rechazo cultural, y tras conocerse los vínculos mencionados entre los promotores y el Ayuntamiento, y después de haber votado a favor de destinar 16 millones de euros al proyectos, sin hacer ninguna objeción.