El Observatorio de LGBTIfobia tramita la primera denuncia por delito de odio en Canarias
Las personas con diversidad sexual podrán comunicar cualquier incidente y situación de discriminación que les afecte en el primer Observatorio contra la LGBTIfobia de Canarias, que ha tramitado ya 49 comunicaciones, entre ellas, la primera denuncia por delito de odio en Tenerife.
El observatorio es el noveno de este tipo que se crea en España y en el archipiélago ha sido promovido por la Asociación de Lesbianas, Gais, Bisexuales, Trans e Intersexual de Canarias Algarabía, cuyo presidente, Charlie Marrero, informó este miércoles de la campaña con la que se difundirá la creación y los objetivos de este organismo.
Su creación ha sido posible tras recibir a finales de diciembre de 2017 una subvención de unos 96.000 euros, que ha facilitado conformar un equipo integrado por una psicóloga, una trabajadora social y un abogado, encargados de supervisar cada incidente que se registre.
La coordinadora del equipo y trabajadora social, Naomi Cordobés, explicó que desde su entrada en funcionamiento, hace un mes, el Observatorio ha recibido las quejas de 49 personas, de las que 13 se han derivado a atención psicológica y el resto a la jurídica.
Veinte de estas personas pertenecen al colectivo trans y la mayor parte de quienes se han dirigido al observatorio tienen entre 19 y 30 años, aunque Naomi Cordobés recordó que otro grupo “con grandes necesidades” es el de los mayores, que son “los grandes olvidados”.
Como resultado se ha tramitado además la primera denuncia por delito de odio en este ámbito presentada en el archipiélago y de la que Cordobés indicó que corresponde a un hecho relacionado con el ámbito sanitario por parte de una mujer trans en Tenerife.
El propósito del Observatorio es recoger datos sobre la situación de la LGTBIfobia en Canarias, con especial atención a los incidentes y delitos de odio, formar y concienciar a colectivos y agentes sociales en materia de diversidad sexual y de género, y reducir la violencia que con frecuencia sufren las personas LGTBI.
Uno de los problemas es que no hay un análisis real de la situación del colectivo en Canarias pese a que la realidad es que “sufre discriminación e incidentes”: el 40% de los estudiantes declara que ha visto alguna situación LGTBIfóbica y los insultos son “el día a día”, añadió Cordobés.
De hecho, las diferentes asociaciones que integran al colectivo LGTBI en Canarias calculan que unas mil personas contactan a lo largo del año por incidentes relacionados con la orientación y la diversidad sexuales.
Al respecto, Charlie Marrero precisó que se difundirán 2.000 carteles y 5.000 anuncios de mano, además de un anuncio en vídeo, para informar acerca del Observatorio, que a final de año prevé presentar un estudio en un seminario con el resto de colectivos.
Con el Observatorio se podrá contactar a través de teléfono, wasaps, página web propia y la de Algarabía, una aplicación para móviles y redes sociales, además de físicamente en las oficinas de la asociación en Santa Cruz de Tenerife, que contactará con los colectivos equivalentes en el resto de islas para las quejas o denuncias que les afecten.
El director general de Juventud del Gobierno de Canarias, Sergio Eiroa Santana, precisó que esta iniciativa “es una gota más” en el trabajo de Algarabía y detalló que la contratación de tres personas para el Observatorio ha sido posible con una subvención del programa de Garantía Juvenil.
