‘The Cliff’, el proyecto de lujo para una montaña protegida impulsado por una poderosa familia belga de Tenerife

Una poderosa familia belga asentada en Tenerife guarda en sus manos un nuevo proyecto para construir un bloque de viviendas de lujo en una montaña protegida. El plan, bautizado como ‘The Cliff’ (El Acantilado), está congelado en el Ayuntamiento de Arona a la espera de la documentación ambiental necesaria, al afectar a un espacio de la Red Natura 2000. Detrás de la obra para urbanizar parte de la ladera del Monumento Natural Montaña de Guaza está el grupo ‘Los Menceyes’, liderado por el cónsul honorario de Países Bajos en la isla, Stan Weytjens, y cuyo nombre hace referencia a los reyes guanches que gobernaban Tenerife.

La parcela afectada por este proyecto inmobiliario es la 17 y está junto a la Avenida del Palm-Mar, en el mismo lugar donde la empresa madrileña Metrovacesa también prevé construir un edificio de viviendas y garajes. En este barrio del sur de Tenerife se han multiplicado en los últimos años los alojamientos y negocios dedicados al turismo, así como también la población extranjera, que supone un 51% del total, con la nacionalidad belga y la alemana como las mayoritarias solo después de la española. Esta zona es, además, uno de los grandes nichos de negocio del grupo ‘Los Menceyes’, que ya tiene en el Palm-Mar otros alojamientos turísticos exclusivos, además de oficinas y locales comerciales.

El solar donde se proyecta The Cliff está atravesado por la Red Natura 2000, impulsada por la Unión Europea para conservar la biodiversidad. Además, este enclave forma parte de la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) Rasca y Guaza, distinguida con esta categoría por ser una de las mejores áreas para las aves esteparias de Tenerife y por albergar algunas colonias de aves marinas como el camachuelo trompetero, la pardela cenicienta, el petrel de Bulwer o el guincho, en peligro de extinción. En la Montaña de Guaza también habita el lagarto gigante, otro animal en riesgo de desaparecer.

Por esta razón, tal y como han confirmado desde el Ayuntamiento de Arona a este periódico, el procedimiento “está paralizado”. “El proyecto que se comercializa en redes como ‘The Cliff’ tiene por objeto la construcción de un bloque de viviendas entre la playa de Palm-Mar y la Montaña de Guaza. Este procedimiento está paralizado, ya que está incluido dentro del ámbito de la Red Natura 2000. Se está a la espera de que se presente el documento ambiental para la tramitación de la evaluación. Mientras tanto, no puede otorgarse la licencia”, aseguran desde la corporación municipal. Ya en junio de 2025, y después de que ‘Los Menceyes’ hubieran promocionado en redes el proyecto ‘The Cliff’, un periódico belga de centroderecha publicó que “pardelas y lagartos gigantes” habían frenado un proyecto de lujo belga en el sur de Tenerife. 

Tal y como consta en el expediente del proyecto, al que ha tenido acceso este medio, la licencia de obra mayor fue solicitada en marzo de 2022 para “bloque de viviendas, locales y garaje”. Un año más tarde, el Ayuntamiento dio a la promotora un plazo de diez días para adjuntar una serie de documentos clave: una autorización emitida por el área del Gobierno canario competente en materia de ordenación del territorio, al afectar las actuaciones a la servidumbre de protección del dominio público marítimo-terrestre; una autorización para trabajar en la parcela al estar esta afectada por el cauce de un barranquillo, y la solicitud de inicio de evaluación de impacto ambiental simplificada acompañada del documento ambiental.

Ante la imposibilidad de aportar en tiempo todos estos informes, la empresa pidió en abril de 2023 al Ayuntamiento la suspensión de la tramitación de la licencia. Este periódico ha preguntado al área de Costas del Gobierno autonómico si se llegó a conceder la autorización para actuar en la zona de servidumbre de protección del dominio público marítimo terrestre, pero no ha obtenido respuesta.

Proyecto de contención de la ladera

Entre otras actuaciones, el proyecto contempla desviar el cauce del barranquillo que atraviesa la parcela, así como realizar labores de contención de la ladera para “impedir la potencial caída de rocas procedentes de la montaña”, tal y como se desprende de un informe elaborado por el Cabildo de Tenerife como órgano gestor del Espacio Natural Protegido. El escrito de la corporación insular responde a una “escueta memoria técnica” aportada por la empresa, que incluye la previsión de ejecutar “un paseo peatonal” en la ladera para poder realizar el mantenimiento de las instalaciones de contención y para ejecutar el canal de desvío del Barranquillo del Callado de Las Arenitas.

El documento del Cabildo, que data de marzo de 2023, dice que las nuevas edificaciones y construcciones constituyen “un uso permitido”. Sin embargo, concluye que “debe ser el Ayuntamiento de Arona” el que aplique las Normas de Conservación del Monumento Natural Montaña de Guaza y el planeamiento municipal. Sobre la afección a la Red Natura 2000, la corporación insular indicó que, “considerando la dimensión y ubicación de la parcela afectada y la naturaleza de las intervenciones [...], no pueden descartarse afecciones directas apreciables del presente proyecto a los valores que motivaron la inclusión de esta zona en la Red Natura 2000”. 

Asimismo, recuerda que “es de prever” que la urbanización de esta parcela y su “puesta en funcionamiento”, así como las actuaciones previstas sobre la ladera, “generen un incremento de la presión sobre el espacio protegido que podría tener efectos negativos sobre las especies protegidas en general y, particularmente, sobre la avifauna objeto de protección europea”. 

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Fuentes de la zona apuntan que en julio de 2025 se procedió al cierre de toda la zona colindante a la parcela por un supuesto riesgo de desprendimiento desde la Montaña de Guaza hacia la Avenida del Palm-Mar. Sin embargo, estas fuentes aseguran que ni siquiera durante la borrasca Claudia se produjeron derrumbes y temen que la adaptación de la ladera justificada en el riesgo de desprendimientos pueda poner en jaque los valores naturales de la zona y dar así vía libre a los proyectos urbanísticos.

En esta línea, desde el Ayuntamiento afirman que existe un estudio que alerta del riesgo de desprendimientos en la Montaña de Guaza que ha obligado a acotar un espacio de seguridad en el Palm-Mar. Desde Arona añaden que se ha pedido licencia para colocar unas mallas que eviten los desprendimientos y que están “en el trámite de solicitud de informe al órgano gestor del Espacio Natural Protegido, dependiente del Cabildo”, sobre la procedencia de sujetar esta intervención a evaluación ambiental. 

Desde el Cabildo de Tenerife aseguran que por parte de la corporación insular “no hay ninguna autorización ni licencia para ese vallado porque es competencia municipal”. “Nuestros técnicos están valorando el entorno de la montaña para valorar riesgos de desprendimientos”, añaden. 

Enjambre empresarial

Aunque el proyecto fue promocionado por el grupo ‘Los Menceyes’ a través de un vídeo que ya ha sido retirado de la plataforma ‘Vimeo’, la empresa que solicitó la licencia al Ayuntamiento de Arona es Lemwey Inversiones S.L., cuyas administradoras mancomunadas son Aline Lemaire y Risco del Mar Tenerife Sur S.L. Esta última empresa fue constituida en 2014 y entre sus administradores estaban David y Timothy Weytjens, hijos de Stan Weytjens y parte de ‘Los Menceyes’. Tanto esta sociedad como Lemwey Inversiones tienen su domicilio social en el Edificio Playa de Los Menceyes, situado en la Avenida del Palm-Mar y donde también se localiza el consulado honorario de Países Bajos.

En la actualidad, según los datos que figuran en el Boletín Oficial del Registro Mercantil, la empresa Risco del Mar Tenerife Sur S.L. tiene como administradoras mancomunadas a las sociedades Antida Mar S.L., Inversiones Dawe Sur, Inversiones Awey Tenerife y Weyro Inversiones. Las mismas que aparecen como administradoras mancomunadas de la empresa Club Los Menceyes, cuyo domicilio social también está en el 91 de la Avenida del Palm-Mar. El proyecto básico fue elaborado por el estudio W Arquitectos, creado por Stan y Timothy Weytjens y localizado en el mismo edificio. 

Además, Lemwey Inversiones ha contratado como consultora a la empresa Anitya Consultores, fundada en el año 2019 por el expresidente del Cabildo de Tenerife con Coalición Canaria (CC) Carlos Alonso. “Lemwey Inversiones es cliente de Anitya Consultores, actuando como asistente al ‘Project Manager’ junto al resto del equipo técnico y jurídico en sus proyectos de inversión”, ha confirmado Alonso a este periódico. Preguntado por si la consultora realiza algún tipo de intermediación entre la empresa y el Cabildo insular sobre el proyecto The Cliff, el expresidente ha respondido: “No realizamos labores de intermediación, sino de apoyo técnico y económico en la gestión de proyectos”.