CIUDAD REAL

La bodega más grande de Europa empezó con 17 pequeños agricultores y ahora tiene su propio museo de arte

En un lugar de la Mancha se encuentra la localidad con más habitantes de esta comarca. Tomelloso tiene un censo de casi 37.000 vecinos y vecinas. Al ser llano prácticamente en su totalidad, de lejos pueden observarse grandes extensiones de cultivo de vid, precisamente por la Autovía CM-42, que recibe ese nombre, la de los Viñedos.

No es de extrañar que la ciudad de Tomelloso cuente igualmente con la bodega y almazara más grande de Europa, agrupada en la Cooperativa 'Virgen de las Viñas'. Cuenta con 20.000 hectáreas de viñedo entre vaso y espaldera; y 2.400 hectáreas de olivar, cuyo producto y derivados gestiona un equipo humano superior a 3.000 personas.

En realidad, esta cooperativa es considerada por muchos expertos la más grande del mundo. Hay una más extensa en California, pero está conformada por varios colectivos “de segundo plano” por lo que los criterios para el ranking dependen relativamente del cristal con que se mire.

De cualquier forma, 'Virgen de las Viñas' es un referente mundial que empezó con una pequeña bodega fundada en 1961 por 17 pequeños agricultores de la localidad. Ahora han más de un centenar de personas trabajando con contrato fijo y que reciben formación continuada gratuita en diferentes áreas especializadas.

Además, un “esfuerzo continuado de mejora” ha permitido que décadas después y debido a la calidad de esos suelos llanos y productivos, sus vinos sean “prácticamente ecológicos”, según defiende la cooperativa. 

Esa misma calidad se asegura y garantiza pese a los grandes volúmenes de producción: más de 150 millones de litros de vino y mosto por campaña. Elabora así sus vinos con las variedades de uva blanca Airén, Macabeo, Sauvignon Blanc, Chardonnay; y las variedades de uva tinta Tempranillo, Garnacha, Cabernet Sauvignon, Moravia, Tinto Velasco, Merlot y Syrah.

Todos ellos están entre sus marcas comerciales: Tomillar, Rocio, Lorenzete, Viña Tomilla y Dº Eugenio, con multitud de premios y reconocimientos. Ahora es todo un gigante dentro de Castilla-La Mancha y de toda España, y un referente en el desarrollo de la capacidad de producción vitivinícola de esta comunidad autónoma.

Su presidente desde hace 25 años, Rafael Torres, cuenta a elDiario.es Castilla-La Mancha, que la cooperativa ha seguido “la misma línea de búsqueda de calidad” desde que se fundó. En su primera producción, entraron 300.000 kilos de uva y al año siguiente ya eran tres millones de kilos. Desde entonces ha ido creciendo exponencialmente hasta haber alcanzado más de 300 millones de kilos de uva anuales.

Los clientes son los verdaderos dueños de la cooperativa

“La transformación en todos estos años ha sido tremenda, sobre todo a nivel tecnológico para hacernos modernos y competitivos. Nos hemos dotado de todas las innovaciones necesarias para elaborar muy buenos vinos, y cumplir con las exigencias que nos marcan los clientes, que, como siempre digo, son los verdaderos dueños de la cooperativa”, explicado.

Una de las grandes apuestas de la cooperativa ha sido el embotellado. Supone el 25% de la facturación, que cada año va aumentando porque han expandido las cadenas de producción. La cifra es vertiginosa: unas 24.000 botellas a la hora. Entre la producción y el embotellado, todos los días hábiles del año salen entre 700.000 y 800.000 litros de vino de la cooperativa.

El presidente de 'Virgen de las Viñas' también pone el acento en la almazara, procedente de los olivares que también crecen esas tierras manchegas. “Nuestra producción de aceite también ha ido creciendo paulatinamente. Empezamos un millón de kilos y después y ya estamos en los diez millones, tras la expansión de las plantaciones.

Hacia el enoturismo y la cultura

Su éxito y expansión han propiciado que con los años haya diversificado sus actividades hacia el enoturismo y la cultura en una obra social pionera dentro de las cooperativas agroalimentarias. Ese compromiso de la cooperativa se hizo realidad tras inaugurar en 2011 el Museo de Arte Contemporáneo Infanta Elena, un centro que alberga una exposición permanente compuesta por obras del 'Certamen Cultural Virgen de las Viñas' que se celebra desde 2001.

Este museo expone además obras de diferentes autores, con diversos estilos, técnicas y temáticas, lo cual hace que sea muy atractivo para los amantes del arte.

En la última convocatoria del certamen, en la modalidad de Periodismo, se premió al trabajo titulado 'La Tierra Santa de Tomelloso', de Javier Ruiz Martínez; y en la categoría de Escultura, fue la obra titulada 'Cavilaciones', de José Lillo Galiani.

La modalidad de Pintura incluye varios galardones, que recibieron las obras 'La belleza del otoño de la vida', de Caroline Culubret Worms; 'Coronación', de Leonor Solans García; 'Sueño de un triángulo', de Alejandro Calderón Martín; y 'Vórtice', de Patricia Ruiz Mayoral. El Premio Regional de Pintura fue para la obra 'Development of a Nude', de Salvador Pérez Tobarra, y el Premio para personas con discapacidad cayó en manos de Julia Martínez Navarro por su obra 'Bodegón con pera'.

En cuanto el enoturismo, la cooperativa aúna arte, tradición y vino mediante tres estancias. Además de la visita al Museo, ofrece conocer el Lagar, el corazón de la bodega que no ha dejado de latir desde sus orígenes. Se trata de un edificio emblemático que actualmente acoge el Museo Etnológico, con una colección de herramientas y útiles que ayudan a recordar cómo trabajaban en los viñedos los primeros pobladores de Tomelloso.

Y otra visita incluye las cuevas excavadas en una placa de piedra caliza recientemente rehabilitadas y abiertas al público para conocer de primera mano cómo se utilizaban hace cien años para elaborar y almacenar el vino. El presidente de la cooperativa adelanta que actualmente están ampliando estas cuevas para “homenajear a quienes las hicieron” porque “ahí empezó la riqueza vitivinícola de Tomelloso”. En total, el auge del enoturismo ha propiciado unas 9.000 visitas anuales.

Hace tres años, la Cooperativa Virgen de las Viñas de Tomelloso celebró sus seis décadas de vida en un evento al que asistieron cerca de 2.000 personas entre socios, autoridades, empresarios y artistas.

El año pasado la bodega y almazara inició un proceso de ampliación de las instalaciones y mejora de la maquinaria debido a la creciente demanda de incorporación de nuevos socios. El proyecto contempla un almacén inteligente, otra sala de barricas, una nueva línea de embotellado, placas solares, un concentrador y rectificador de mostos y más prensas neumáticas.

Y su expansión sigue adelante también mediante fusiones. El pasado mes de junio se unió a Bodegas San José, tras haber realizado anteriormente dos fusiones, con la cooperativa de San Gregorio y con la Almazara de Tomelloso. Desde la cooperativa Virgen de las Viñas no se descartan más proyectos de fusión con otras cooperativas y bodegas, entre ellas de Manzanares.