El trabajo de dos artesanas toledanas que reivindica el patrimonio natural de Castilla-La Mancha

'Tierra y ládano' es el proyecto colaborativo creado entre las artesanas toledanas Alhaja Cerámica (María Camisón) y La Marihuela (Esther Álvarez) que resultó ganador en la categoría de Producto en los últimos Premios de Artesanía de Castilla-La Mancha. Dotado con 2.000 euros, el premio reconoce con “especial énfasis” los productos que sirven de “espacio de encuentro” y que fomentan la “cultura colaborativa” entre las personas dedicadas a la artesanía. Pero 'Tierra y ládano' es mucho más que la colaboración entre dos proyectos artesanos emergentes. Es también un llamado de atención a la cultura y al patrimonio castellanomanchego, a la riqueza natural que existe en la región y que no siempre se observa ni valora.

En sí, el producto es una botella de cerámica con varillas de ratán que difunden los aromas de aceites esenciales basados en los aromas que se pueden encontrar en los Montes de Toledo. En propias palabras de las artesanas es una “ventana” a los montes toledanos, gracias a los aceites esenciales utilizados. Esther Álvarez, La Marihuela, explica que el producto también ha resultado en una oportunidad para encontrar el impulso de difundir el ládano como materia prima de gran calidad, ya que es una resina “muy valorada” en el ámbito de la perfumería natural, en todo el mundo. Para poder realizar los aceites, desde La Marihuela tuvieron que cultivar sus jaras propias.

Alhaja Cerámica creó una botella, de la que se han hecho moldes para poder abaratar los costes del pack que cuesta 40 euros. Las decoraciones de cada botella, eso sí, serán diferentes. Pero toda la producción, aunque sea en molde, será cien por cien artesana. Las varitas de ratán están sin tratar y tienen una capacidad de desprender aromas de forma ligera y constante. “Este reconocimiento importante para nuestra visibilización y también para que los años tan arduos de trabajo valgan la pena”, explica María, de Alhaja Cerámica. Ambos proyectos llevan años colaborando de diversas maneras, con kits de autocuidado, jabones y jabonera, o un proyecto a futuro que es una lámpara para quemar esencias. “No paramos hacer productos colaborativos”, asegura Camisón.

Pero además de la colaboración entre dos artesanas emergentes, 'Tierra y ládano' quiere visibilizar la riqueza de la materia prima y los productores que hay en Castilla-La Mancha. Desde La Marihuela señalan que este valor se aprecia más bien desde fuera que desde dentro. Y el ládano es una muestra de ello. “Es una oleoresina muy valorada porque es un excelente fijador de perfume con notas de fondo muy valoradas, pero que sólo se encuentra de exportación”, explica Álvarez. Por eso, se decantó finalmente por la autoproducción. Ahora, la idea es animar a las destilerías a que reconozcan el valor del ládano, y utilizar así las propiedades del producto que se puede encontrar en la región. “Queremos resaltar el patrimonio natural de Castilla-La Mancha a través de sus aromas”.

Alhaja Cerámica también resultó finalista en la categoría de Diseño de los Premios de Artesanía junto al proyecto Ca Chi Va Che, de Natalia Mora, en la creación de una lámpara con una pantalla de porcelana y un tubo metálico lacado en amarillo, que permite subir y bajar la intensidad de la luz.