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La consulta sobre hoteles de ERC deja en la cuerda floja el plan de alojamientos turísticos de Colau

Barcelona quiere gestionar el turismo con un plan especial de alojamientos

Yeray S. Iborra

Las próximas horas marcarán el futuro del Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (PEUAT) de Barcelona. Tras meses de negociación, ni siquiera la necesidad de aprobar el plan este mes de enero ante el levantamiento de la moratoria hotelera en Gracia ha ablandado las posturas entre el gobierno de Barcelona y la oposición. ERC, el partido que tiene la llave de la aprobación, se encuentra ahora mismo lejos del 'sí'.

“Las negociaciones no han avanzado”, han declarado fuentes del partido republicano en este medio. La celebración de tres consultas ciudadanas sobre tres hoteles proyectados en zona 1 –las ubicaciones más saturadas desde el punto de vista turístico– sigue siendo condición 'sine qua non' para Esquerra.

Sin embargo, el gobierno ha reiterado su postura: no se harán consultas vinculadas a los hoteles. O, en todo caso, se harán después de estudiar los casos uno por uno, pero siempre fuera del PEUAT. Además, el gobierno ha dicho que mantendrá sí o sí el PEUAT en el orden del día de la comisión de Ecología, Urbanismo y Mobilidad de este miércoles.

El grupo municipal de ERC ya alertó este domingo al Ayuntamiento que no entiende por qué el gobierno Colau se “niega a consultar a la ciudadanía”. “Mientras no se acepte esta condición, no podemos aprobar el plan”, destacó el líder de ERC, Alfred Bosch. Una postura que la formación ha reiterado a Catalunya Plural.

ERC no será el único hueso para el gobierno si quiere presentar este miércoles en comisión –primer paso para la aprobación definitiva en el pleno de finales de mes– el plan y recibir el apoyo previo de las formaciones. CiU se ha sumado en las últimas horas en las críticas al plan de alojamientos turísticos de Colau.

El portavoz de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, Joaquim Forn, ha dicho este lunes que su partido está “cada vez más alejado” del PEUAT. Además, ha alertado de que su grupo no se sentirá “coaccionado” porqué venzan las moratorias hoteleras. “Alguien ha calculado mal y ha pensado que tendría un apoyo que no tiene”, ha subrayado Forn, negándole a Colau su apoyo sin condiciones.

La versión de ERC y CiU sobre la hostilidad en las negociaciones con el gobierno contrasta con la postura manifestada este lunes por la teniente de alcaldía de Ecología, Urbanismo y Movilidad, Janet Sanz. “La voluntad del gobierno ha sido escuchar a todos: ha habido decenas de encuentros. Con los grupos, pero también con los vecinos y con el sector”, ha dicho Sanz, que ha recordado que en los últimos meses se han producido nueve reuniones con ERC, seis con Ciutadans y CUP, cinco con CiU y una con el PP.

El gobierno de la ciudad ha defendido especialmente su mano extendida hacia organizaciones como ERC y la CUP. “Se han incorporado la mayoría de sus peticiones. Esquerra ha presentado 12 propuestas y casi todas están en el texto articulado. Las alegaciones de la CUP muchas estaban fuera del marco del PEUAT, pero las trabajaremos”, ha explicado Sanz. De momento sólo la CUP ha dicho que no pondrá trabas al plan.

Más zonas de la ciudad protegidas

Por primera vez, el gobierno también ha entrado en el detalle del plan. La teniente de alcaldía, Janet Sanz, ha explicado este lunes algunas claves del PEUAT. La zonificación, según destaca el consistorio, ha sido un elemento central del plan, pero también una piedra en el zapato a lo largo de las negociaciones.

“Había propuestas de máxima restricción: el caso de la CUP, que quería toda la ciudad congelada. Y había otras propuestas más flexibles: CiU, de hecho, quería que Ciutat Vella fuera el único espacio que estuviera restringido”, ha dicho Sanz, que ha añadido que las zonas de restricción han sido justificadas técnicamente, y que no son un “capricho” del gobierno.

Finalmente, si prospera el PEUAT, en Sant Martí se incorporarán Villa Olímpica y Poblenou a la Zona 1 (espacio de máxima protección). Además, el barrio de Llacuna pasará a zona 2 (espacio de mantenimiento); el Eixample incorporará parte del barrio de Sant Antoni a la Zona 1; y Sants Monjuïc tendrá el barrio de Hostafrancs en máxima protección también.

La zonificación permitirá pues mantener en la zona 1 y 2 la tolerancia cero hacia nuevos alojamientos turísticos y reservará para la zona 3 el crecimiento controlado. Según el PEUAT, el crecimiento de la zona 3 permitirá “descongestionar la zona 1 y 2”. En total, el plan tolerará que las consideradas zonas 3 admitan unas 400 nuevas viviendas turísticas. Los nuevos alojamientos turísticos pero deberán corresponder siempre a “bloques enteros y que antes no tuvieran uso residencial”.

El gobierno también ha defendido la mejora de criterios reguladores en las diferentes zonas: qué se puede hacer y qué no en relación a parámetros y distancias –una enmienda de ERC, CiU y Ciutadans– en la zona 2 y 3. El Ayuntamiento quería que ninguna calle por debajo de ocho metros de acera dispusiera de nuevos hoteles. En cambio, con la propuesta de ERC, CiU y Ciutadans, en las calles de entre seis y ocho metros de acera se podrán hacer hoteles pequeños, de 50 plazas.

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