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El Gobierno favorecerá que los parados se hagan autónomos

(EFE)

Belén Carreño

El programa de medidas anunciado hoy por Rajoy en su primera intervención en el debate del estado de la nación tiene un doble foco: por un lado, combatir el paro juvenil rebajando al mínimo las condiciones para hacer un contrato a un menor de 30 años y por otro, favorecer el autoempleo y el emprendimiento. En este segundo vector, el presidente ha anunciado un conjunto de medidas que colman gran parte de las aspiraciones de los autónomos y que pueden fomentar la creación de puestos de trabajo propios en un entorno donde la creación de empleo es casi imposible.

La medida más demandada por el colectivo de trabajadores por cuenta propia es la de pagar el IVA cuando ingresan la factura, lo que se conoce como “criterio de caja”. Hasta ahora, un autónomo tenía que dar el IVA a Hacienda de facturas sin cobrar, que en algunos casos no llegaba a pagar nunca o cuyo ingreso veía tres meses después. Aunque la noticia ha sido muy bien acogida por el sector, tiene un pero importante: no se pondrá en marcha hasta enero de 2014. Eso hace que en el que puede ser el último ejercicio de crisis los autónomos seguirán adelantando el IVA de sus ingresos.

A la ya conocida y anunciada cuota fija de 50 euros para los jóvenes menores de 30 años que se hagan autónomos, se añaden medidas como la compatibilidad de prestación por desempleo y trabajo autónomo o la ampliación de los supuestos de capitalización del paro. Así, los menores de 30 podrán recibir el 100% de su paro si es para aportarlo a una sociedad mercantil, con la que vaya a tener una relación laboral.

Otra mejora de la capitalización es que estará por completo exenta de IRPF, cuando ahora solo lo estaba hasta 15.500 euros. La capitalización del paro se podrá utilizar además para pagar trabajos de asesoría o formación, o para cubrir los gastos de constitución de una nueva sociedad.

Además, el emprendedor que se decida a ser autónomo, sin utilizar su paro, podrá acceder a su bolsa de desempleo si pasados cinco años del inicio de su actividad empresarial tiene que volver a cobrar el desempleo. La protección de los nuevos autónomos se elevará también al contar con la figura del emprendedor “con responsabilidad limitada” una fórmula que busca frenar los embargos ante situaciones de insolvencia de un autónomo, salvaguardando la vivienda habitual u otros enseres. En este sentido, Rajoy ha anunciado también una mejora del proceso concursal de los emprendedores, aunque no se conocen detalles de esta reforma.

En el terreno fiscal, los autónomos podrán aplicarse una reducción del 20% en los rendimientos netos en los dos primeros años que logren beneficios. Además, si lo que se crea es una nueva sociedad mercantil, esta podrá tributar con un tipo reducido del 15% en Impuesto de Sociedades los dos primeros años que tenga que declarar este impuesto (que solo opera en caso de beneficios empresariales). El tipo actual para las pymes está en un 20% y en un 25% para las grandes empresas (de forma general).

También se incentiva la entrada de nuevos inversores en empresas, siempre y cuando el carácter de la inversión sea temporal para que esté dentro del contexto de inversión de “capital riesgo” o semilla. En este sentido, un socio capitalista puede contar con una deducción del 15% en la cuota estatal del IRPF durante su inversión y, además, tendrá un descuento del 50% en la plusvalías (ganancias), que logre al salir de la sociedad, siempre y cuando reinvierta esta inversión. La permanencia en la sociedad tiene que estar entre los 2 y 9 años.

Por último, se crea una nueva figura fiscal ligada a la inversión en I+D+i. La novedad de este incentivo fiscal, que no se aclara en el programa anunciado esta mañana, radica en que será un crédito fiscal para la empresa en caso de que no tribute por el Impuesto de Sociedades por no tener beneficios. Según Hacienda, es el primer incentivo fiscal que se instrumenta para empresas sin resultados positivos, siempre y cuando estén también ligados al empleo.

Más crédito

Rajoy también ha anunciado medidas para reactivar el crédito a las pymes por valor de 45.000 millones de euros. La mitad de este tipo de líneas son las conocidas líneas del Instituto de Crédito Oficial (ICO) para pymes. Pero el presidente ha hecho otro anuncio al asegurar que “la banca saneada” proporcionaría otros 10.000 millones de euros en créditos a pymes. Esta medida es, por ahora, una incógnita.

La otra mitad del crédito anunciado se instrumenta mediante diferentes fórmulas financieras. Se promocionará que las empresas se financien por vías que no sean las financieras habituales, como en los mercados de capitales, o por un fondo de titulización para pymes. También se ampliará el plan de pago a proveedores, que ascenderá a 2.684 millones de euros y una nueva ley para reducir los pagos a 30 días, 60 en algunos casos y aumentar los intereses de demora.

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