El genio de la lámpara

Héctor Serrano es en apariencia un joven de lo más normal normal. Viste con vaqueros y luce una camiseta de rayas verdes y negras. Usa gafas de pasta y parece una persona tranquila y pausada por su manera de hablar. Sin embargo, su mente produce ideas extraordinarias. Este diseñador industrial afincado en Londres es el autor, entre otros diseños, de la Lámpara Superpatata, de un envase que combina el aspecto de una botella de agua mineral de litro y medio y las ventajas de un botijo tradicional o de un abanico super fashion que permite transmitir mensajes de texto y, por tanto, es de gran utilidad para ligar con los chicos.

Su web de su estudio da buena cuenta de sus magníficas aportaciones. Durante el segundo día de las 13+1 Jornadas de Diseño, que se están celebrando en la Escuela de Arte y Superior de Diseño de La Rioja, ha dado buena cuenta de sus últimos trabajos. Innovación y familiaridad son los dos conceptos que subyacen en cada uno de sus proyectos, ha insistido durante su exposición. “Tiene un gusto extraordinario para convertir lo ordinario en extraordinario”, ha dicho de él durante su presentación Beatriz Fernández, profesora de diseño de producto. Rioja2.com ha mantenido un breve encuentro con el responsable de Manolo se va a divertir, un proyecto que pretende aplicar el diseño a objetos cotidianos.

- ¿Cómo es la Lámpara Superpatata?

- Es una lámpara en la que, básicamente, se puede manipular la cantidad de luz a través de aplastar y moldear la propia lámpara. El nombre procede en parte del popular personaje Mr. Potato, al que podías cambiar las caras mediante la incorporación o la retirada de objetos como las gafas, las orejas o la nariz. También está inspirado en otro juguete. Esta lámpara tiene mucho de juego.

- ¿Es el diseño del que más orgulloso se siente?

- Sí que es cierto que fue un diseño que supuso el comienzo del estudio. Fue el consiguió mucha promoción y sirvió para darnos a conocer.

- Después de la Lámpara Superpatata, ¿qué queda por hacer?

- Se han hecho proyecto de todo tipo: lámparas, muebles y otros relacionados con espacios e interiorismo.

- Diseño e industria, ¿son conceptos contradictorios?

- En absoluto. Son dos cosas que deben ir de la mano para conseguir un resultado óptimo. No deben enfrentarse, todo lo contrario, deben ir juntos.

- ¿Los diseñadores pecan de demasiado innovadores?

- Siempre intentas acoplarte a las necesidades del cliente y, a partir de ahí, hacer tu propia aportación. La innovación es un elemento importante en cada proyecto y siempre quieres ir más allá. Intentamos trabajar con clientes que tienen especial interés por desarrollar proyectos con una gran carga de innovación.

CREATIVIDAD

- La creatividad, por tanto, es cosa de dos.

- Es un diálogo constante. No es algo que el diseñador aplica de forma aislada y luego se lo presenta al cliente. Debe haber una relación buena para que al final de la historia sea bonita y tenga buen fin.

- Creó su propio estudio en 2000, después de trabajar en otros por cuenta ajena. ¿El balance es positivo?

- Sí, es positivo, a pesar del gran trabajo y esfuerzo que implica. Está resultando una experiencia interesante. Consigues ir avanzando e ir haciendo trabajos cada vez más interesantes y seguir aprendiendo, aspecto que considero muy importante.

- ¿Cómo decidió dedicarse a esta profesión?

- Empecé a dedicarme al diseño porque no quería estudiar. Cuando terminé el instituto estaba un poco harto de la teoría y de echar codos. Quería algo más práctico. Un amigo me recomendó el diseño. Me metí sin tener ninguna preparación previa en diseño y la verdad es que estoy muy satisfecho. En el primer año empiezas a descubrir cosas que ni siquiera conocías. De ser un estudiante totalmente nefasto pasé a sacar buenas notas y comprobé la alegría de lo que esto supone en la cara de mis padres y mis profesores. Todo genial.

MOTIVACIÓN- ¿Cómo piensa motivar a los jóvenes estudiantes que han venido a verle?

- Espero que el propio trabajo les inspire. Quiero dejarles claro que estudiar diseño no entraña una gran dificultad y que lo importante es demostrar mucho interés, tener muchas ganas y aprender a sacarte las castañas del fuego. Es posible ganarse la vida con esto y disfrutar con ello. Cada uno debe buscar su camino y sus intereses para hacer esto una profesión.

- Por último, ¿dónde se encuentra la inspiración?

- La inspiración se encuentra en todos los sitios. Cada día ofrece grandes oportunidades para la inspiración en lo que ves, lo que respiras… Es algo abstracto, que, además, depende mucho del proyecto. Cada cosa que ves y que respiras se puede relacionar con el proyecto y hace que sea susceptible para inspirarse.