“La pelota no me debía nada, yo se lo debo todo”

Augusto Ibáñez no dudó en dedicar el triunfo a su padre, fallecido hace una semana: “Va por él y por toda mi familia. Por ellos. Desde arriba sé que quería que hubiese jugado y me ha ayudado, porque, si no, hoy hubiésemos perdido”.

Titín destacó la irregularidad del partido y la dificultad para sacarlo adelante: “Ha habido tacadas para ambos, no ha sido un partido muy ortdoxo. He cogido ventaja pronto, me salían las cosas: he arriesgado y pegaban todas encima de la chapa, pero luego él ha cogido buenos pelotazos”. Pese a todo, Titín estaba satisfecho del encuentro, al que calificó de “buen ritmo, no muy peloteado ”.

Preguntado sobre el subcampeón, Titín quiso “felicitarle, es un gran campeón. Dicen que todos recuerdan al final quién ha ganado, pero Abel ha sabido superar todos sus problemas y hoy, hasta el último tanto, no se ha rendido. Quizás otros hubieran tirado la toalla. Mi enhorabuena para él, porque cualquiera se hubiera merecido la victoria”.

Finalmente, Titín insistió en que “yo se lo debo todo a la pelota” y que la pelota no le debía a él ningún título. “Los títulos cuesta conseguirlos, hay que ser muy regular y he tenido la suerte de poder ganar esta final”. “A ver si así ese mito de que la pelota me debe una txapela ya lo hemos quitado. Los riojanos se lo merecían y yo encantado y a seguir igual”, concluyó.