Las autoridades mexicanas evacuan a 200 personas en Oaxaca

El estado mexicano de Oaxaca sigue viviendo las consecuencias de las fuertes lluvias y del alud que éstas provocaron. Al menos 200 personas han sido desalojadas de Tlahuitoltepec, ante el peligro de nuevos desprendimientos, según informó el comisionado de Seguridad Pública, Jorge Alberto Quesadas.

Unos 250 efectivos de protección civil participan en las tareas de evacuación de los vecinos para evitar que la continuidad de las intensas lluvias que provocaron el desprendimiento del cerro de La Curva desencadenen una catástrofe similar en otras zonas inestables del municipio.

Mientras, continúa la búsqueda de las 11 personas desparecidas tras el derrumbe, entre las que podrían encontrarse seis menores, según indicó el director del Departamento de Bomberos, Manuel Maza Sánchez. Al menos 600 rescatistas participan en las tareas de salvamento, entre bomberos, policías, militares y voluntarios.

Sin embargo, Mazas Sánchez explicó que el elevado número de personas que colaboran en los trabajos de rescate está retrasando el hallazgo de los desaparecidos por lo que instó a los vecinos a mantener la calma y a no sobredimensionar la magnitud del accidente, informó el diario Milenio.

Responsabilidades

Por otro lado, la procuradora de Oaxaca, María de la Luz Candelaria Chiñas, descartó que se fuera a iniciar un proceso judicial contra las autoridades del municipio de Tlahuitoltepec por informar de forma errónea sobre el número de víctimas y de viviendas afectadas por el alud.

“La verdad es que sí fue un deslave muy estruendoso, abarcó mucha extensión y existía la presunción que hubiera sido de una magnitud mayor, pero las autoridades lo que hicieron fue informar y no por esto se les va a sancionar”, dijo Candelaria Chiñas en declaraciones a los medios locales.

La funcionaria explicó que a pesar de que el informe que divulgaron las autoridades locales en la madrugada del martes no era certero, “hay que considerar que a la hora que dieron el aviso no había plena visibilidad, estaba lloviendo bastante fuerte y la situación era de emergencia”.

Así, la procuradura aclaró que miembros de la institución que dirige permanecen en el lugar del desprendimiento para atender la emergencia, desmintiendo así los rumores que apuntaban a la apertura de una causa penal contra el gobierno municipal. “Hay peritos y policías pero para continuar las tareas de auxilio, no para otro asunto”, precisó.