La patronal de la construcción califica de “pelotazo urbanístico” la Ecociudad

El secretario general de la CPAR, Juan Ramón Liébana, ha afirmado que el desarrollo de la nueva Ecociudad que pretende llevar adelante la Comunidad en el monte El Corvo anticipa que el presidente regional, Pedro Sanz, no va a permitir el desarrollo de los nuevos sectores de Logroño.

Liébana ha insistido en que la puesta en marcha de estos sectores, repartidos por toda la capital riojana, en los que está previsto la construcción de diez mil viviendas, cinco mil de ellas de protección oficial, facilitaría el crecimiento natural de la ciudad por su ubicación y sus conexiones.

“Si no salen adelante, esto supondrá la puntilla a la construcción residencial, que está atravesando por el peor momento de su historia”, ha dicho.

PROYECTO DE LA ECOCIUDAD

El represente de los constructores riojanos ha insistido en que el proyecto de Ecociudad, que contempla el levantamiento de 2.932 viviendas, sólo responde a un “afán personalista” del presidente regional y a una estrategia de confrontación con el Ayuntamiento de Logroño y con la representación empresarial.

También ha recordado que se ubica en unos terrenos rústicos de alto valor ecológico y protegidos por el Plan General de Ordenación Urbana de Logroño por su alto interés paisajístico y ha insistido en que la operación no es nada más que un “pelotazo urbanístico”.

En este sentido ha destacado que los terrenos se compraron a razón de seis euros el metro cuadrado y que ahora se está hablando de un valor de novecientos euros el metro cuadrado si se desarrolla el proyecto.

La superficie total sobre la que se va a desarrollar la Ecociudad es de unas 56,24 hectáreas, de las que solo un 10,7 por ciento de ellas serían construidas.

El MAYOR DESPROPÓSITO URBANÍSTICO

“Este proyecto de Ecociudad es la mayor desfachatez urbanística que una administración pública ha realizado en la historia reciente de nuestra Comunidad”, ha dicho Liébana, quien se ha preguntado como se va permitir construir hasta en once alturas en el monte El Corvo, cuando en el resto de la ciudad sólo se permiten cinco.

Liébana ha animado a los arquitectos riojanos a que expongan lo que les parece este proyecto, ha dicho que el mismo destruirá la libertad de elección del lugar de residencia de los ciudadanos y ha destacado que todo se ha “cocinado con nocturnidad y alevosía” y que esto “no tiene mucho que ver con la transparencia que predica el PP”.