Las dos caras de la calle Múgica

Los vecinos de Múgica se dividen entre los que viven en una calle amplia, moderna y renovada y los que padecen las aceras estrechas, el deterioro de materiales y la doble fila en una vía de doble dirección. Las condiciones no son las mismas para los que viven en el tramo comprendido entre Gran Vía y Pérez Galdós y los que viven entre Pérez Galdós y Huesca.

En julio de 2014 se inauguraba la calle tras unas obras que se prolongaron durante cuatro meses y que supusieron un importante lavado de cara para esta céntrica vía de Logroño. Aceras más anchas, menos aparcamientos, un sólo carril de circulación, nuevo mobiliario y mejor iluminación. Mejoras que, sin embargo, sólo se acometieron en la mitad de la calle.

El segundo tramo, el comprendido entre Pérez Galdós y Huesca, continúa a la espera. Y así seguirá porque el proyecto de remodelación de esta calle no se contempla en el presupuesto municipal de este año. Por eso, vecinos y comerciantes han decidido unirse para dirigirse de forma conjunta al Ayuntamiento a través de la asociación de vecinos.

Han conseguido reunir más de 400 firmas para solicitar unas obras que consideran urgentes. “No entendemos que haya vecinos de primera y de segunda”, protestan, “sólo se han preocupado por el tramo que se ve desde Gran Vía, los que vivimos más arriba, donde no se ve, no merecemos que se arregle nuestra calle”.

Creen que el Ayuntamiento “tiene manía a la calle Múgica” aunque en alguna ocasión ya les han explicado que estas obras están en la lista. “Dicen que estamos los segundos, por detrás de Vélez de Guevara, pero nos preguntamos si no será que somos los segundos por la cola”.

“QUE SE PRIORICE OTRA CALLE NO SIGNIFICA QUE SE OLVIDE MÚGICA”

Desde el Ayuntamiento, el concejal de Vías Urbanas, Francisco Iglesias, asegura que la calle Múgica “nunca ha estado en el olvido”. Según sus palabras, “las obras de esta calle se hicieron por fases y, aunque este año no haya una partida porque se han priorizado las obras de Vélez de Guevara, en 2017 podríamos contar con una pequeña partida que, si encaja, podría servir para terminar la calle Múgica”.

Asegura además que, aunque los vecinos aseguran haber entregado las firmas a su asociación para que las traslade al Ayuntamiento, “aquí no hemos recibido ninguna firma, al menos durante esta legislatura”. No obstante, Iglesias se ha mostrado dispuesto a hablar con los vecinos y comerciantes para explicarles cómo están las cosas.