Un ambiente medieval en pleno Casco Antiguo de Logroño

Las fiestas de San Bernabé están proporcionado a Logroño un ambiente medieval. Los pendones que cuelgan en la calle Portales, los inventos de Leonardo Da Vinci que lucen junto a San Bartolomé, los mil y un productos que se pueden encontrar en la Plaza del Mercado... todos estos elementos contribuyen a dotar a la ciudad de un espíritu cercano al de principios del siglo XVI.

Los balcones de muchas casas del Casco Antiguo se han engalanado para participar en esta reproducción del medioevo. Las actividades se suceden en distintos puntos de la zona antigua de la ciudad, a pesar de que las tropas francesas siguen apostadas en el parque del Ebro esperando con ansia el comienzo de la batalla.

Los niños pueden disfrutar así del taller de tiro con arco en la Plaza de San Pablo. Si alguno muestra una especial destreza en el arte de la guerra puede que sea reclutado en las milicias logroñesas, tan necesitadas de personal. Los cuentos y las leyendas conforman otro mundo de especial importancia en este época ya tan lejana. El colectivo Humo nos acerca esta atmósfera de brujas, fantasmas y dragones en la Plaza del Parlamento.

Una colección de aves rapaces se encuentra apaciblemente descansando en la Plaza de Santiago, esperando su momento en la exhibición de cetrería que se desarrollará en dos sesiones, matinal y vespertina.

El teatro también recibirá su merecido protagonismo con la representación de la pieza Los bailes del deseo en la Plaza del Mercado a partir de las 19.00 horas.

Los actos se suceden en un programa repleto de actividades para todas las edades y gustos. El final del día coincidirá con la representación del popular acto de El reloj de San Bernabé en el balcón del Ateneo Riojano.