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El nuevo centro sanitario Adoración Sáenz tendrá cinco quirófanos y trabajarán más de 100 profesionales

Proyecto del nuevo Centro de Especialidades y Cirugía Mayor Ambulatoria Adoración Sáenz

Rioja2

7 de octubre de 2024 13:30 h

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El nuevo Centro de Especialidades y Cirugía Mayor Ambulatoria ‘Adoración Sáenz’, que se ubicará en el solar en el antiguo Hospital San Millán, estará en marcha en 2027. El centro tendrá un total de 7.000 m2 en los que se distribuirán cinco quirófanos de cirugía mayor ambulatoria (semisótano), la Unidad del Dolor (planta baja) con 8 consultas y otras 20 en Oftalmología (planta primera); así como un aparcamiento subterráneo. La previsión es que el centro sea atendido por más de un centenar de profesionales y supondrá la incorporación de nuevos profesionales sanitarios de distintos ámbitos y especialidades.

La propuesta es, además, flexible y polivalente, dejando preparada la estructura para una posible ampliación futura de otros 2.500 m2, en los que según la previsión del Servicio Riojano de Salud se podría completar la oferta de Oftalmología y también de la especialidad de Dermatología.

El presidente del Gobierno de La Rioja, Gonzalo Capellán, ha destacado que el nuevo Centro ‘Adoración Sáenz’, “un proyecto estratégico y transformador”, ha dicho, tiene una “importancia trascendental porque ofrecerá nuevos espacios para reorganizar todo el ecosistema sociosanitario, nos permitirá descongestionar la tensión asistencial del CARPA y del Hospital San Pedro, ampliar la atención a los ciudadanos y contar con un equipamiento e infraestructuras en la vanguardia en la prestación del servicio sanitario”.

Capellán, y los arquitectos del futuro centro, Ángel Carrero y Patricio Martínez, han presentado este lunes, 7 de octubre, los detalles del proyecto de este nuevo centro que vendrá a incrementar la capacidad asistencial de la sanidad riojana y a mejorar la calidad en la atención a los pacientes. “Un proyecto ilusionante y un reto de futuro para este Gobierno, que se preocupa de la planificación estratégica a medio y largo plazo, y para todos los riojanos”.

Gonzalo Capellán ha recordado que el análisis y diagnóstico elaborado nada más acceder al Gobierno evidenció que “la tensión asistencial que experimentaban el Hospital San Pedro y el CARPA hacían necesario ampliar y mejorar las infraestructuras para potenciar la capacidad asistencial del ecosistema sanitario. A partir de ese estudio, fuimos capaces de anunciar el pasado mes de enero este proyecto innovador, que supondrá un salto cualitativo en la mejora de la atención sociosanitaria. Nueve meses después, podemos ver con detalle cómo será el Centro de Especialidades y Cirugía Mayor Ambulatoria ”Adoración Sáenz“, dando así el pistoletazo de salida para la elaboración del proyecto básico”.

El edificio se construirá en la zona sur de la parcela del antiguo hospital San Millán, junto al Carpa (Centro de Alta Resolución) y a la Escuela de Enfermería. Será un edificio flexible y polivalente, pensado para adaptarse a las necesidades cambiantes de una dotación sanitaria.

Según las previsiones dadas a conocer esta mañana en una rueda de prensa en la que también ha asistido la consejera de Salud y Políticas Sociales, María Martín, el proyecto básico del centro Adoración Sáenz se entregará en enero de 2025, redactándose el proyecto de ejecución en el primer semestre del próximo año y licitando la obra en el segundo semestre. De este modo, la construcción podría comenzar a principios de 2026 y estar en servicio en 2027. La inversión para este proyecto en su primera fase (sin contar la posible futura ampliación) se ha estimado en 17.226.708 euros.

Instalación puntera con equipamiento y técnicas avanzadas 

El Servicio Riojano de Salud conseguirá con esta nueva infraestructura ampliar su capacidad asistencial, agilizando los procesos diagnósticos y terapéuticos ambulatorios y contribuyendo de este modo a descongestionar otros centros de la red sanitaria como el Hospital Universitario San Pedro o el Carpa que soportan una alta presión asistencial.

Desde el punto de vista tecnológico, se concibe como una instalación puntera, dotada de equipamiento y técnicas avanzadas para tratamientos más eficaces y menos invasivos, teniendo en cuenta que cada vez hay más procesos quirúrgicos que pueden llevarse a cabo sin ingreso.

La cartera de servicios se ampliará y se basará, por tanto, en especialidades cuyos procesos son susceptibles de ser mayoritariamente realizados en régimen ambulatorio, como los de la Unidad del Dolor, Oftalmología y (en una segunda fase) Dermatología. Coincide además que son algunas de las áreas con mayor demanda actual y previsión de crecimiento futuro, especialmente vinculado al envejecimiento de la población. Dentro de estas especialidades se ofrecerá una atención integral, contemplándose para ello el establecimiento de consultas, gabinetes de pruebas diagnósticas, salas blancas y cirugía ambulatoria. En la Unidad del Dolor se incluye también una sala de fisioterapia y un área de recuperación. Del mismo modo, los quirófanos del centro prestarán servicio a la cirugía sin ingreso de otras especialidades.  

Tal y como ha avanzado el presidente, “en el ámbito de la oftalmología se integrará también el área de optometría, que antes solo se ofrecía en el Hospital de Calahorra. Además, en este nuevo centro se refuerza y amplía algo tan importante como la fisioterapia”.

La previsión en materia de recursos humanos estima que este centro será atendido por más de un centenar de profesionales y supondrá la incorporación de nuevos profesionales sanitarios de distintos ámbitos y especialidades.

La Unión Temporal de Empresas (UTE) “CEPA Arquitectura e Ingeniería y PMMT Arquitectura” fue la ganadora del concurso convocado para la redacción de este proyecto. Los responsables de estos equipos de arquitectura han concebido el edificio situado junto a la Escuela de Enfermería como “un pabellón sobre un parque”; una infraestructura ligera de planta baja más una, sobre un zócalo más cerrado de semisótano y sótano.

Desde el punto de vista organizativo, el edificio se plantea en una malla estructural en torno a patios interiores que aportan luz natural y humanizan el espacio, además de ser puntos de referencia para la orientación interior. En el exterior, se configurará una zona verde de comunicación entre las plazas Donantes de Sangre y Joaquín Elizalde. En el frente de la Plaza Joaquín Elizalde se ubicará el acceso peatonal al centro a través de una pérgola.

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