El Plan A pone como límite junio de 2018 para cerrar el tráfico Chueca y Malasaña

La cuenta atrás para que los vehículos de los no residentes dejen de circular por el Centro de la ciudad de Madrid ya ha comenzado. Según la versión definitiva del Plan A de calidad del aire, presentada el martes por Inés Sabanés, el primer semestre de 2018 es la fecha tope para el cierre al tráfico de Chueca, Malasaña y el resto de barrios de Centro que formarán parte del APR único de todo el distrito.

El documento definitivo, que se votará hoy en la Junta de Gobierno, establece que por ese Área de Prioridad Residencial (APR) podrán circular libremente todos los residentes, prohibiendo el desplazamiento del resto de vehículos, salvo algunas excepciones.

El periodo de alegaciones del Plan A, cuya primera versión se presentó el pasado mes de marzo, ha servido para modificar aspectos como el de la distribución urbana de mercancías (medida 15), en el que se ha modificado el calendario de acceso de los vehículos sin distintivo al Área Central Cero Emisiones para dar más margen en función de las toneladas de masa máxima.

Ha servido también para ampliar el periodo durante el que los camiones y furgonetas de carga y descarga podrán seguir accediendo al Centro. Los que tengan etiqueta B y pesen entre 3,5 y 12 toneladas pueden trabajar en el Centro hasta el año 2022, mientras que los más pesados pueden entrar en la zona APR hasta el año 2025.

El Plan A, que cuenta con 30 medidas que se detallarán en los próximos días, preveía además la creación de «un sistema de gestión y control de las plazas en vía pública reservadas para la carga y descarga en la ciudad de Madrid mediante una aplicación específica y un registro municipal de operadores de distribución urbana».