Una de las últimas adquisiciones del fondo Merlin en el complejo de AZCA va a pasar a mejor vida. El Edificio Serantes, ubicado en el número 7 de la plaza de Pablo Ruiz Picasso, será demolido para construir en su lugar un nuevo inmueble que encaje en el proyecto para reformar toda la zona. Así ha informado este jueves el Ayuntamiento, cuya Junta de Gobierno ha admitido a trámite y aprobado el plan especial para este inmueble, que incluye el derribo total de la actual construcción.
El Serantes, con una característica marquesina central, ocupa desde el año 1981 sitio al oeste de la plaza, en paralelo a los edificios de viviendas de la calle Orense. Sus locales albergan oficinas y comercios, además de tres plantas de sótano destinadas a aparcamiento de vehículos su superficie total abarca 4.330 m2.
Merlin, propietario de varios edificios en AZCA, adquirió el inmueble en el año 2022 con intención de renovar las instalaciones y favorecer una mejora en la accesibilidad y al tránsito de peatones en el interior de este complejo de oficinas. Esa es la intención del plan aprobado ahora, que hace ganar una cantidad notable de espacio público a cambio de redistribuir la superficie del futuro centro de oficinas.
En este contexto, los propietarios del inmueble plantean su demolición y la construcción de uno nuevo, como una de las acciones previas a la ejecución del proyecto de Renazca, la idea impulsada por parte de las empresas con sedes en AZCA que está siendo reformulada después de descartarse la privatización de este espacio a través de una concesión durante cuatro décadas.
El proyecto sobre el edificio Serantes ahora inicialmente aprobado contempla, entre otras cuestiones, la adaptación del nuevo edificio a la normativa vigente, la modernización de las instalaciones, la mejora de su eficiencia energética la optimización de los espacios y su integración en el entorno urbano. El nuevo edificio propuesto mantiene la edificabilidad en los 4.300 m2, aunque reduce la superficie sobre la que se edificará hasta los 1.736 m2 (actualmente ocupa 2.659 m2). Tendrá tres plantas sobre rasante y otras tres de sótano. Para su construcción, los propietarios contemplan un plazo de cuatro años de obras.
El complejo AZCA (Asociación Mixta de Compensación de la manzana A) se implanta en una supermanzana rectangular, configurando un tejido urbano singular. Su concepción urbanística, propia de la década de 1970, se caracteriza por la densificación de usos terciarios y la creación de un espacio público y privado a diferentes niveles.
Muchos de los edificios que componen la manzana están siendo actualmente objeto de remodelación en el marco de la renovación y regeneración urbana de dicho complejo. Dentro de esta transformación de AZCA, se contempla el rediseño y la regeneración de los espacios que lo integran y una reestructuración integral de los flujos y accesos mediante la reconsideración de las circulaciones peatonales existentes, para garantizar una accesibilidad universal.
Sin embargo, esta transformación va con retraso: el pasado verano todas las empresas implicadas en las conversaciones para sacar adelante un proyecto básico pidieron tres meses más al Ayuntamiento para ponerse de acuerdo. Este jueves, cuando ya se ha pasado eses plazo, el delegado de Urbanismo ha evitado poner fecha a un acuerdo definitivo y tan solo añadió una dilación más: “A lo largo de 2026”, aseguró.