Canciller brasileño: “Mercosur busca mayor integración económica con Asia”

El Mercosur “busca una mayor integración económica” con Asia impulsando acuerdos de libre comercio con Japón, Corea del Sur y Singapur, dijo hoy a Efe el ministro brasileño de Asuntos Exteriores, Aloysio Nunes Ferreira, durante su viaje a Tokio.

Entre los países latinoamericanos que conforman el Mercado Común del Sur “hay un interés creciente” para ampliar sus alianzas comerciales y “movimientos recientes” en esta dirección, explicó Nunes durante su visita a Japón, una etapa clave de su amplio tour por el continente asiático centrado en la cooperación económica.

Esta gira ha servido para abrir un “diálogo exploratorio” con Singapur sobre un acuerdo comercial y para “preparar el terreno” de cara a unas futuras conversaciones con Tokio, según dijo Nunes, que además de estos dos países ha visitado también Tailandia, Indonesia y Vietnam.

Japón supone “un mercado importantísimo” para el Mercosur, además de ser “un gran socio comercial y económico” de Brasil gracias una sólida relación bilateral fundada sobre los amplios flujos migratorios entre ambos países y sobre la significativa presencia de empresas niponas en su territorio, destacó Nunes.

El archipiélago nipón es el sexto mayor socio comercial de Brasil, donde además hay instaladas más de 700 empresas japonesas y cerca de 2 millones de japoneses o descendientes de nipones.

Durante su visita a Japón, Nunes se reunió con miembros del Gabinete del primer ministro Shinzo Abe y representantes de Keidanren, la principal patronal nipona, para “explicar la situación de la economía brasileña” y dar garantías sobre “su recuperación tras la crisis y las reformas aplicadas”.

El canciller afirmó que el “entendimiento es total” entre el sector privado japonés y brasileño de cara a un futuro acuerdo comercial, que ofrecería a las dos partes “complementariedad y ventajas recíprocas”.

Por ello, aseguró que las conversaciones con la tercera economía mundial “están muy bien encaminadas” para iniciar unas conversaciones formales con el Mercosur, y señaló que la cumbre del G20 que se celebrará a finales de noviembre en Buenos Aires “serían el momento idóneo” para comenzar esos contactos.

Nunes viajará asimismo a Corea del Sur la semana que viene con el objetivo de iniciar las negociaciones formales con la cuarta economía de Asia, que podría convertirse así en la primera del continente en sellar un acuerdo comercial con el Mercosur.

Estas alianzas se sumarían a la de la UE, con la que el Mercosur está “cerca” de concluir sus negociaciones, y a la de Canadá, país que ya negocia formalmente un pacto con el bloque regional actualmente integrado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.

El canciller brasileño también trató durante sus encuentros con miembros del Ejecutivo nipón otros temas referentes a las relaciones internacionales, entre los que destaca el proceso de diálogo abierto con Corea del Norte con vistas a lograr la desnuclearización del régimen.

Brasil “está totalmente alineado” con la posición de Naciones Unidas y por tanto es “partidario de mantener las sanciones sobre Corea del Norte en la cantidad e intensidad decididas por el Consejo de Seguridad”, destacó Nunes.

“Creemos que estas presiones internacionales tienen que continuar hasta que este proceso concluya de manera positiva para la paz en la región”, señaló el canciller, quien se mostró así en sintonía con la postura de Japón, partidario de mantener las medidas punitivas sobre el régimen hasta que dé pasos concretos hacia el abandono de sus armas nucleares.

Nunes también admitió la “sorpresa” que le produce el cruce de declaraciones entre Washington y Pyongyang a menos de un mes para la histórica cumbre entre sus respectivos líderes, Donald Trump y Kim Jong-un, aunque expresó su confianza en que la reunión que celebrarán el 12 de junio en Singapur se salde con resultados positivos.

El viaje a Japón del canciller brasileño se produce en el marco del 110 aniversario del inicio de la inmigración de japoneses a Brasil, una efeméride que se conmemora con una serie de actos y visitas como la prevista de la princesa nipona Mako a Brasil a mediados de julio.