El Ejército portugués cerrará el depósito donde se produjo un robo de armas

El Ejército portugués va a cerrar el depósito militar de la localidad de Tancos, en el centro del país, donde se produjo un robo de material de guerra a finales de junio, informa hoy el semanario luso Expresso.

Según el medio, la decisión fue comunicada por el jefe del Estado Mayor del Ejército, Frederico Rovisco Duarte, al primer ministro luso, António Costa, durante una reunión que mantuvieron el pasado martes en Lisboa.

Entre las razones para desactivar estas instalaciones militares estaría la exposición del local a “elementos exteriores”.

Las autoridades portuguesas sospechan que, por la forma en que se efectuó el robo en Tancos, los ladrones contaron con algún tipo de “información interna” sobre las instalaciones.

Entre el material sustraído el pasado 28 de junio, por un valor cercano a los 34.000 euros, figuraban granadas de mano y de gas lacrimógeno, municiones, cartuchos y otro tipo de explosivos.

También había varios lanzacohetes, pero el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas portuguesas, Artur Pina Monteiro, explicó esta semana que no funcionaban “con eficacia” e iban a ser destruidos.

La Fiscalía lusa abrió una investigación, que se encuentra bajo secreto sumarial, por sospechas de “crímenes de asociación criminal, tráfico de armas internacional y terrorismo internacional”.