PNV exige un cambio de actitud al Gobierno antes de negociar los Presupuestos

El PNV se ha mostrado hoy prudente ante el nuevo gobierno formado por Mariano Rajoy, que ha rechazado prejuzgar, pero le ha reclamado un cambio de actitud sin el que, ha advertido, el PNV no entrará a negociar los Presupuestos para 2017.

En una rueda de prensa celebrada en Bilbao, el portavoz del Grupo Vasco en el Congreso, Aitor Esteban, ha instado a ese cambio de actitud en tres asuntos que considera fundamentales: el modelo territorial, la economía y la paz y convivencia.

Ha explicado que el “tono conciliador” es para “no hablar de lo no hecho todavía”, pero ha recalcado que si esos tres problemas no se afrontan y se “dejan encima de la mesa como hasta ahora, empeoran”.

No obstante, ha considerado que “muy rápido, en un par de meses o tres”, se comprobará si hay un cambio de actitud o “si es un gobierno meramente continuista”.

“Si es así lo va a pasar muy mal” al estar en minoría en el Congreso, ha advertido antes de confiar en que los ministros “harán un cursillo acelerado” de diálogo y negociación porque “a la fuerza ahorcan”.

Ha insistido en que sin un cambio de actitud del Gobierno el PNV no entrará a negociar los Presupuestos para 2017, además de que está convencido de que la intención del Partido Popular es acordar las cuentas con el PSOE y con Ciudadanos.

Esteban ha criticado que ayer mismo el Gobierno central, todavía el que estaba en funciones, comunicó al Ejecutivo vasco que recurriría otra ley aprobada por el Parlamento de Vitoria, como ha hecho con otras normas vascas o las oposiciones de la Ertzaintza durante toda la legislatura pasada.

El portavoz nacionalista ha considerado que el nuevo gabinete es “muy al estilo Rajoy, con pocos cambios”, aunque ha señalado que tampoco “esperaba gran cosa más”.

Preguntado por la atribución a Soraya Sáenz de Santamaría de las relaciones con las comunidades autónomas, ha negado que el PNV tenga una “buena sintonía” con la vicepresidenta, aunque haya sido la interlocutora habitual de su partido con el Gobierno, y lo ha dejado en un “nos conocemos, sin más”.

Ha sostenido que en el ámbito territorial Sáenz de Santamaría debe afrontar las reivindicaciones nacionales de Cataluña y Euskadi y solucionar los conflictos que mantiene el Estado con el País Vasco, como el Cupo o los recursos contra leyes autonómicas.

“Espero que no lo afronte como la abogada del Estado que es, sino como una política abierta a la discusión y el acuerdo”, lo que conlleva cesiones de las dos partes, ha manifestado.