La Policía invita a presentar un libro de ética a su exdirector procesado por corrupción Juan Cotino

A la espera de sentarse en el banquillo de los acusados por delitos de corrupción que le pueden acarrear más de 15 años de cárcel, Juan Cotino, exdirector del Cuerpo Nacional de Policía, ha vuelto este martes a su antigua casa. Ha sido como invitado a intervenir en la presentación del libro Ética policial y ciudadanía, que se ha celebrado en la sede de los servicios centrales que el Cuerpo tiene en el madrileño barrio de Canillas, según han explicado a eldiario.es fuentes policiales.

Cotino fue el primero de los dos directores generales de la Policía durante el mandato de José María Aznar. Desempeñó el cargo entre 1996 y 2002, año en el que pasó a ser delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana. Después ocupó varias consellerias y llegó a vicepresidente del Gobierno de Francisco Camps y presidente del Parlamento valenciano. Retirado de la primera línea de la política, Cotino responderá en los próximos meses junto a los cabecillas de la trama Gürtel por la pieza separada de la visita del Papa a Valencia. Anticorrupción pide para él 11 años de cárcel por malversación de caudales públicos, fraude en la Administración Pública, cohecho pasivo y prevaricación continuada. La acusación popular, que ejerce el PSPV, eleva la petición de condena a 15 años y 8 meses.

El acto de presentación de Ética policial y ciudadanía ha tenido lugar en la sala de prensa de Canillas, perteneciente a la Subdirección de Logística e Innovación. Cotino se ha sentado en el estrado junto a la subdirectora general de Recursos Humanos y Formación de la Policía, Pilar Allúe, y al subdirector general del Gabinete Técnico, José Manuel Pérez, miembros de la Junta de Gobierno que ha nombrado el actual Gobierno socialista.

En la misma mesa estaba el también comisario Mario Hernández, director de la Fundación Policía Española, y el autor del libro, Juan Vicente Herrera, asesor ejecutivo de Cotino durante los ocho años que éste fue director de la Policía. El pasado mayo, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil interrogó a Cotino como investigado en el marco de la Operación Erial, por la que Eduardo Zaplana lleva en prisión provisional cinco meses. Cotino se negó a declarar.

Consultada por eldiario.es, la Dirección General de la Policía asegura que el acto ha estado organizado por la Fundación Policía Española, con personalidad jurídica propia, y que Cotino ha sido invitado en su condición de patrono de la misma, como el resto de los que han sido directores generales.

Sin embargo, se han cursado invitaciones personales encabezadas por los membretes del Ministerio del Interior y de la Dirección General de la Policía. Es el actual director general del Cuerpo Nacional de Policía, Francisco Pardo, quien ha tenido “el honor de invitar” al mismo a parte de los asistentes, según consta en las tarjetas que ha podido consultar este medio y que se cursaron el pasado 10 de octubre.

Debía confirmarse la asistencia en la dirección de correo electrónico protocolo@policia.es o en varios teléfonos pertenecientes a la Dirección General. En la misma invitación se requiere a los asistentes que pertenezcan a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado “Uniformidad de Represetanción con Pasadores” y al resto de asistentes “Traje Oscuro”. Otras invitaciones consultadas no personalizadas corrían a cargo de la Fundación Policía Española y lucían junto a su logo el escudo del Cuerpo Nacional de Policía.

“Factótum” en el saqueo de fondos públicos

El juez José de la Mata atribuye a Cotino un papel “nuclear” y de “factótum” en el saqueo de fondos públicos en la retransmisión de la visita de Benedicto XVI a la capital valenciana, en los que intervino a pesar de que su conselleria carecía de competencias en el evento. A través de la televisión autonómica valenciana, el Grupo de Correa obtuvo más de 7 millones de euros por aportar las pantallas y la megafonía, un coste “desorbitado y notoriamente superior al servicio prestado”, según el magistrado. La trama Gürtel obtuvo alrededor de 3,3 millones de euros de forma irregular.

Cotino siempre ha ejercido un papel beligerante con sus antiguos subordinados encargados de investigar la corrupción del Partido Popular. Hasta tal punto que contrató a uno de los abogados de Francisco Correa para querellarse contra el inspector Manuel Morocho, el agente 81.067 que firmaba los principales informes policiales del caso Gürtel y de la financiación irregular del Partido Popular. Cotino denunció a Morocho sin éxito.

Luis Bárcenas declaró durante la instrucción que Juan Cotino se desplazó de Valencia a Madrid el 11 de marzo de 2004, el día de los atentados yihadistas, para entregarle 200.000 euros de la empresa de su sobrino, Vicente Cotino. El exdirector de la Policía admitió ante el juez haber estado en Génova ese día, pero aseguró que fue para comentar los hechos ocurridos aquel día en varias estaciones de tren de Madrid. Finalmente, en esta trama no fue imputado. Cuando se conoció la apertura de juicio oral contra él, el exdirector de la Policía aseguró: “He podido meter la pata, pero no la mano”.