La portavoz de Podemos no se cierra a pactar con Vox “propuestas concretas”

Madrid, 11 jun (EFE).- La nueva portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, Carolina Alonso, está dispuesta a pactar con Vox en esta legislatura si eso permite que “alguna propuesta concreta” pueda salir adelante, pese a que sea una formación política “antagónica” y con la que no querría “tener que ir a ningún sitio”.

En una entrevista con Efe, Alonso apunta que Vox se ha encargado de “centrar todos sus ataques y sus odios” en Unidas Podemos, pero no descarta pactar temas puntuales con la formación liderada por Rocío Monasterio para sacar adelante alguna iniciativa puntual, ante la falta de mayoría absoluta del bloque de la izquierda.

“Habría que ver qué es lo que se está proponiendo y para qué”, aclara.

El PP logró en las elecciones autonómicas del 4 de mayo 65 escaños, a 4 de la mayoría absoluta (69) y Vox 13, Más Madrid y PSOE 24 cada uno y Unidas Podemos 10 .

Además, en la Mesa de la Asamblea, órgano clave para poder plantear iniciativas en el Parlamento madrileño, la derecha tiene un control casi absoluto ya que el PP ha conseguido cuatro de los siete puestos, mientras que Vox, Más Madrid y PSOE tienen uno cada uno, y Unidas Podemos ninguno.

Alonso augura que esta legislatura será “muy difícil”, con una presidenta a punto de ser investida de nuevo en el cargo, Isabel Díaz Ayuso (PP), “poco conciliadora” y que “nunca se ha sentado con la oposición para llegar a acuerdos”, sino que está centrada en “utilizar” la gestión autonómica como “ariete de oposición al Gobierno del Estado”.

Y mientras, asegura, los madrileños son “utilizados como rehenes”.

Alonso asumió el cargo de portavoz parlamentaria de Unidas Podemos el martes, día de constitución de la Asamblea de Madrid, en sustitución de Isa Serra, que renunció a su escaño para centrar su actividad en el partido a nivel nacional acompañando a la nueva ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra.

“En realidad no nos pilló tan de sorpresa”, apunta la nueva portavoz, que sostiene que esta decisión “ya se venía barajando” ante la posible ratificación por parte del Tribunal Supremo de la condena de Serra de un año y siete meses de prisión por participar en los altercados de un desahucio en 2014.

Alonso, que se presentó como número 7 a la lista de confluencia de Unidas Podemos (aunque era la tercera procedente de Podemos), se encontró al frente de una portavocía y de una legislatura que su grupo afronta con la motivación de haber mejorado resultados con respecto a 2019, al pasar de 7 a 10 diputados.

No obstante, aplaude que su candidato, Pablo Iglesias, al que identifica como un “auténtico referente”, dimitiera de sus cargos y dejara la política tras el mal resultado del bloque de izquierdas en la Comunidad de Madrid, tras una “gran campaña electoral” en la que sufrió “acoso personal y político”.

A quien no cree que vaya a echar de menos en la Asamblea es a Cs, partido al que acusa de “haber tenido una actitud bastante cómplice con Ayuso” durante la anterior legislatura, cuando gobernaban en coalición.

Alonso destaca la capacidad de gestión de Unidas Podemos al frente de ayuntamientos y del Gobierno central, donde gobierna junto al PSOE de Pedro Sánchez. Y con esa bandera se presenta como “una alternativa a la gestión del PP”, al que acusa de limitar sus acciones a “las privatizaciones, el neoliberalismo y la desigualdad”.

Su intención en la Asamblea de Madrid es trabajar de una forma “muy coordinada” con PSOE y Más Madrid, los otros dos partidos de la izquierda con los que en la legislatura pasada “ya tenía muy buena sintonía”.

No obstante, lamenta que Más Madrid rechazase ir con Unidas Podemos en una candidatura única en las elecciones autonómicas del 4 de mayo, y que el PSOE “no tuviera un resultado bueno, porque hubiera sido positivo para poder sumar”.

Alonso asegura que no estará en la dirección nacional de Unidas Podemos y que “está totalmente centrada en la Comunidad de Madrid”.

También rechaza que exista una mala relación con IU, incluso después de que tras las elecciones se filtrase un fragmento de una conversación privada en la que la número 3 de la lista de Unidas Podemos, Vanessa Lillo, vertía críticas a la formación morada y les llamaba “ratas y sinvergüenzas”.

“Con Vanessa hemos trabajado con total coordinación y perfectamente, y creo que así debe seguir”, asegura la portavoz, que considera que ese episodio fue “algo puntual, no trascendente”.

Asegura que todo el grupo trabajará unido y “con mucha ilusión y mucha energía” para devolver a los madrileños el foco de la política autonómica y “reducir la desigualdad”.

Patricia Cristóbal