El anteproyecto de ley de medicamentos y productos sanitarios que ha aprobado este martes el Consejo de Ministros no gusta a la industria farmacéutica. Las patronales de medicamentos innovadores (como Farmaindustria), de genéricos (AESEG) o de biosimilares (BIOSIM) consideran en un posicionamiento conjunto que el nuevo sistema de regulación de precios propuesto por el Gobierno para los medicamentos fuera de patente “pone en riesgo el abastecimiento y el tejido industrial farmacéutico de España”.
El texto todavía tiene margen para cambiar hasta que se envíe al Congreso para su tramitación. De momento se ha aprobado en primera vuelta, como anteproyecto, y ahora necesita someterse a todos los informes de los órganos consultivos y a la información y audiencia pública para seguir su recorrido.
Una de las grandes novedades que plantea es un sistema llamado de “precios seleccionados” con el que el Gobierno asegura que se da más dinamismo y se resta “rigidez”. En la práctica va a significar, si nada cambia, que no solo habrá un único precio para genéricos y marcas para que los medicamentos sin patente sean financiados (el mínimo), sino una horquilla. Las marcas podrán venderse a un precio por encima del umbral, según estos cambios, y el paciente podrá adquirirlas pagando un poco más. Una parte –el equivalente al precio más bajo del sistema– quedará cubierta. Con estos cambios el Gobierno quiere evitar “bajadas temerarias” y garantizar una mayor cuota de mercado a los genéricos.
Informa Sofía Pérez Mendoza