La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo ha asegurado que aunque el rechazo de Chile a una nueva Constitución sea algo “triste”, el país “ha dado una lección de democracia”. Este domingo, el 62% de los chilenos decidía votar por mantener la Carta Magna actual, que fue escrita en 1980 durante la dictadura de Pinochet y reformada de manera parcial posteriormente.
“Confío en que el pueblo chileno conseguirá a través del diálogo avanzar en el proceso constituyente. Chile ya cambió y, más pronto que tarde, se dará a sí mismo una nueva constitución”, ha zanjado Díaz en un mensaje de Twitter.